Los Papas y la Democracia

por Yves Dupont

[El folleto original que contiene esta obra tiene imágenes de varios papas en su portada. El siguiente texto también se incluye en el folleto, dando una breve historia de cada uno los Papas que aparecen. -Editor.]

ACERCA DE LOS PAPAS EN LA PORTADA
[Mencionados en el presente]

Pío VI (1775-1799).
Cosechó los frutos amargos de la política de apaciguamiento de su predecesor, Clemente XIV. Fue removido a la fuerza de su palacio por las tropas francesas que habían invadido el Vaticano, su anillo pontificio fue despojado de su dedo y, a la edad de 82 años, fue arrastrado a Francia, donde murió prisionero en condiciones humillantes.

Pío VII (1800-1823).
El general Bonaparte se había entonces convertido en Napoleón I. A Pío VII le fue apenas mejor que su predecesor. Ante las extravagantes demandas, valientemente respondió que "Ningún emperador tiene derechos en Roma". Napoleón atacó los Estados Pontificios. Las tropas francesas avanzaban cuando excomulgó al emperador. Fue hecho prisionero, pasó 3 años de su cautiverio en Italia, y los últimos 2 en Francia. Sin embargo, regresó a Roma después de la caída de Napoleón, y murió ocho años después, en 1823, a la edad de 81 años.

Gregorio XVI (1831-1846).
La revolución estalló cuando tomó su trono, pero Gregorio no vaciló, consciente de que los revolucionarios italianos contaban con el respaldo de sus colegas franceses, aceptó la ayuda de las tropas austríacas. La Santa Sede estaba a salvo. Fue enemigo del Liberalismo y la Democracia, un firme creyente en la alianza del trono y el altar. Luchó contra el Liberalismo durante toda su vida con la mayor energía, y se opuso a todas las innovaciones.

Pío IX (1846-1878).
Aclamado como un Papa liberal por los revolucionarios de todos los matices, Pío IX vivió la Revolución de 1849, pero de repente y por completo, renunció a sus antiguas políticas de apaciguamiento. Su famoso "Syllabus" condenó los errores que alguna vez había alentado. Además, definió los dogmas de la Inmaculada Concepción y la Infalibilidad Papal contra la furia de los librepensadores y católicos liberales por igual.

León XIII (1878-1903).
Confirmó las enseñanzas de sus predecesores en términos muy claros, fue el autor de encíclicas trascendentales sobre el gobierno político, preguntas sociales, y condenó a la naciente "Democracia Cristiana", como totalmente opuesta a la Verdad Católica.

San Pío X (1903-1914).
Bajo su pontificado ideas masónicas y liberales ya habían penetrado seriamente el pensamiento Católico: condenó los errores de los Modernistas y Sillonistas, se enfrentó contra el Gobierno francés masónico en una serie de cuestiones vitales, y ratificó el concepto Monárquico-Jerárquico del Gobierno.

Pío XI (1922-1939).
Su reinado fue relativamente tranquilo después de la Primera Guerra Mundial, pero luchó contra la creciente influencia del Socialismo y Comunismo, y reafirmó los principios básicos de la política del gobierno que enseña la Iglesia.

Pío XII (1939-1958).
Él también combatió al Comunismo con el máximo vigor y condenó el Totalitarismo en todas sus formas. Al final de la Segunda Guerra Mundial, su Discurso sobre la Democracia fue una advertencia indirecta contra los errores de Occidente. En los frentes filosóficos y doctrinales, condenó los errores del Teilhardismo y del Progresismo que iban a superar a la Iglesia poco después de su muerte.



"El soberano absoluto puede ser un Nerón, pero a veces es un Tito, o un Marco Aurelio, la gente es a menudo Nerón, y nunca Marco Aurelio". (Rivarol)

"La monarquía está por naturaleza disociada del gobierno de un partido, la Democracia está por naturaleza liderada por un partido..." Incluso un monarca de dones naturales y talentos mediocres tiene la ventaja de haber recibido una educación de su profesión; un líder democrático, en la mayoría de los casos, no es más que un diletante... "Mientras la monarquía era una fuerza viva, las guerras eran de naturaleza relativa y limitada. Ningún monarca fue desposeído a fondo y el precio a pagar por la derrota militar no era más que una ciudad, un condado, una provincia. No había tal cosa como "rendición incondicional" La conscripción fue un invento de la Revolución Francesa como también las guerras que se basan a nivel nacional..." Un monarca y, más aún, una dinastía, pueden planificar políticas a gran escala - para el control remoto así como para un futuro inmediato. Puede haber confianza mutua relativamente mayor en un mundo monárquico, porque los cambios de dirección política son menos. Hoy en día todo Europa nerviosamente mira todas las elecciones nacionales de América ... Burckhardt escribió: "Puesto que la política se ha basado en las fermentaciones internas de las personas, todo seguramente está llegando a su fin ...'" (Erik von Kuehnelt-Leddihn, "Liberty or Equality")


CONTENIDO:

INTRODUCCIÓN

PARTE I. NOCIONES GENERALES

1. Comunismo, Democracia, Monarquía
2. Marxismo, Liberalismo, Teísmo
3. El Liberalismo
4. La Democracia y el Capitalismo
5. El Socialismo y el Colectivismo
6. ¿Qué es la Democracia?
7. El Origen de la Democracia
8. Los Dos Conceptos de Democracia
9. La Democracia como la Fuente de la Autoridad
10. Las Dos Formas de Democracia Moderna
11. ¿Qué es el Gobierno del Pueblo?
12. ¿Cómo se pueden elegir Gobernantes del Pueblo y por el Pueblo? 
13. La Verdadera Democracia es Buena


PARTE II. CONCEPTOS ESPECÍFICOS

14. La Fuente de la Autoridad
15. ¿Es el Hombre Libre, Pensante y Responsable?
16. ¿Puede el Hombre ser Libre, Pensante, y Responsable?
17. La Libertad Cristiana y la Libertad Democrática
18. Libertad, Igualdad, Fraternidad
19. La Separación de la Iglesia y el Estado
20. Completa Libertad de Expresión
21. Igual Cooperación de Todos los Ciudadanos


PARTE III. SOBRE LOS EFECTOS DE LAS IDEAS MODERNAS

22. Soberanía Popular
23. La Opinión Pública y los Partidos Políticos
24. La Demanda Elevada de la Responsabilidad
25. La Libertad en General
26. La Libertad de Opinión
27. La Libertad de Expresión
28. La libertad de Acción y el Capitalismo
29. Igualdad y Educación
30. Cortando al Estado de la Iglesia
31. La Igual Cooperación... Una Pelea Dispareja
32. La Democracia Moderna, su Resultado
33. Pío XII y los Derechos del Hombre
34. Parlamento, Sufragio y Poder
35. El Poder Personal y el Fascismo
36. Cardenales y Políticos


PARTE IV. EL PLAN MAESTRO DEL DIABLO

37. El Desarrollo de los Errores Modernos
38. Un Proceso Sutil y Gradual
39. Una Trinidad Impía
40. Diabólicamente Lógico
41. Dando al Hombre lo que es de Dios
42. El Árbol Genealógico de los Errores Modernos
42a. Observaciones sobre el Árbol Genealógico


PARTE V. LA ACTITUD DE LOS CATÓLICOS EN UN MUNDO DE ERRORES

43. Lo que Piensan los Papas
44. Lo que Piensa el Hombre Moderno
45. Cómo Hablan los Papas
46. Cómo Habla el Hombre Moderno
47. Lo que los Papas nos Dicen que Hagamos
48. Las Advertencias de los Papas
49. La Prudencia Humana y la Sabiduría Divina
50. La Locura del Evangelio
51. La División de los Católicos
52. Algunas Objeciones y sus Respuestas


CONCLUSIÓN: VOLVER A LA CORDURA

53. Acción, Movimiento, Velocidad
54. El Fatalismo de la Historia
55. La Historia de un Error
56. El Mundo del Mañana


INTRODUCCIÓN

"La Idea Democrática favorece el fomento de un tipo humano preparado para la esclavitud en el sentido más sutil de la palabra." (Nietzsche) "No tiene en cuenta otro criterio mas que la voluntad popular expresada en las urnas y en las mayorías parlamentarias ... En el orden de las ideas, es un error absoluto; en el orden de los hechos, es desorden absoluto." (Dr. Don Félix Sardá y Salvany, 1886) "Es la independencia total del Hombre, el Hombre considerado como la única fuente de la Verdad, la Bondad, la Justicia, la Autoridad, el Bien y el Mal; el Hombre sin reconocer a ningún otro Señor y Dios fuera de sí mismo, la Moral se convierte en una cuestión de normas comunes - cambiantes como el Hombre mismo; la ley de Dios no existe" (Rev. M. Tamisier, S.J.) Este tratado sobre la democracia fue escrito originalmente en 1962, poco antes de la apertura del Concilio Vaticano Segundo. Fue sometido a una editorial católica - y rechazado. Esto fue comprensible; mientras el Concilio Vaticano II marcó el triunfo del Liberalismo y del Modernismo, no inició esos males, estos habían estado con nosotros desde hace muchas décadas pero su trabajo subterráneo a menudo pasaba desapercibido.

El rechazo de este manuscrito, entonces, no fue inesperado. Ya en 1956 me di cuenta del trabajo en los túneles pasando dentro de la Iglesia. Los años transcurridos desde 1962, sin embargo, han hecho que muchas de mis primeras proposiciones sean mucho más creíbles de lo que eran entonces; los disturbios civiles, a menudo con derramamiento de sangre, se han extendido a todos los países. Las escenas están tomando lugar en las calles de Melbourne, que ahora aceptamos, ya que han crecido poco a poco, pero eran bastante desconocidas en 1962. Recuerdo que estaba hablando con un amigo que compartía mi opinión de que la sangre pronto se derramaría en Melbourne. Estuvimos de acuerdo en que se nos calificaría de "chiflados" si alguna vez mencionábamos esto públicamente. Melbourne, y Australia en general, estaban entonces notoriamente libres de las locuras comunes en Europa Occidental. Sin embargo, Australia se ha alineado rápidamente con el resto del mundo y escenas desagradables ahora no son raras en nuestras calles. Como resultado, los mismos ideales de la democracia están siendo interrogados por los escritores que, en ocasiones, encuentran un espacio en los periódicos como "The Age" y el "Herald". Este cuestionamiento es aún más notable en el extranjero, lo que demuestra que los pocos que piensan están empezando a preguntarse si no hay algo radicalmente erróneo en nuestra peculiar idea de lo que una Democracia debería ser, y si sus apariencias engañosas no ocultan en una úlcera incurable. En 1962, sin embargo, tal cuestionamiento era prácticamente desconocido. Y en 1945, había tal obsesión con las ideas democráticas que Pío XII, cuando consideró necesario advertirnos de ellas, creyó conveniente hacer una distinción algo irreal entre la verdadera y la falsa Democracia. No es que la distinción es en sí misma irreal, pero en 1944-45 ningún país occidental estaba dispuesto a admitir que su marca de democracia era falsa, y que la verdadera democracia en el sentido Tomista puede, como el mismo Pío XII dijo, ser encontrada hasta dentro de una monarquía absoluta. Las advertencias de Pío XII, por lo tanto, cayeron en oídos sordos. Incluso peor aún, ¡su encíclica fue interpretada como una reivindicación de la democracia! ¿Por qué estuvo tan enamorado Occidente de la democracia? La razón es obvia. Hitler acababa de ser derrotado, y Hitler, a los ojos de Occidente, representaban la antítesis de la democracia. Este punto de vista, por supuesto, era bastante absurdo: Hitler llegó al poder precisamente por la constitución democrática de la República de Weimar, al igual que Lenin llegó al poder en 1917 gracias a la Democracia Menchevique de Kerensky. En una monarquía él no hubiera tenido ninguna posibilidad. La República de Weimar fue realmente democrática, pero Alemania acababa de perder la Primera Guerra Mundial y su situación económica estaba lejos del arreglo. Más aún, el pueblo alemán fue dolorosamente afectado por la humillación de su derrota. El Káiser, que, en 1914 había intentado sin éxito disuadir a la aristocracia militarista prusiana, estaba en exilio, y era tenido en Occidente como el tirano sediento de sangre responsable de la Guerra. Así nació la República de Weimar - la creación del Occidente democrático. No pasó mucho tiempo para que Hitler llegara al poder ya que, en efecto, las masas democráticas siempre se imponen los peores tiranos posibles en tiempos de estrés aguda. La Democracia Política no es un régimen viable y duradero; es esencialmente inestable, abierta a intrigas, dada a la demagogia; es un proceso que conduce a la desintegración completa de la Nación primero, y del Estado eventualmente. Los disturbios y la violencia crecerán hasta la anarquía. Las naciones Occidentales, incluyendo Australia (que es culturalmente Occidental), seguramente experimentarán la dictadura, un mal peor que la Democracia, sin embargo, su inevitable resultado. (Esta nota fue añadida en 1971. Al manuscrito se le han puesto algunas citas de las encíclicas que se han publicado después de 1962.) LOS PAPAS Y LA DEMOCRACIA "Por mucho tiempo he estado convencido de que las instituciones que son puramente democráticas deben, tarde o temprano, destruir la libertad, o la civilización, o ambas cosas... El socialismo es la enfermedad que asiste a las democracias maduras." (Lord Acton)


PARTE I. NOCIONES GENERALES

1. COMUNISMO, DEMOCRACIA, MONARQUÍA

¿Qué vemos en la escena mundial de hoy? ¿Cuáles son las fuerzas políticas que se enfrentan entre ellas, los conceptos compitiendo por el apoyo popular? En general, tenemos al Comunismo, la Democracia y la Monarquía. Este último, sin embargo, no tiene gran importancia como fuerza política, pero todavía está allí y, aunque diluido hasta el punto de perder todos sus atributos específicos en Occidente (por ejemplo, Inglaterra), parece estar reviviendo en algunas de las naciones emergentes.

2. MARXISMO, LIBERALISMO, TEÍSMO

Estos sistemas políticos toman su origen en tres diferentes ideologías: el Marxismo por el Comunismo, el Liberalismo por la Democracia y el Teísmo por la Monarquía. En Occidente, cuando la monarquía estaba en su apogeo, contó con el apoyo de la Iglesia Católica, aunque la Iglesia nunca enseñó que la monarquía hereditaria era la única forma concebible de gobierno legítimo. Sin embargo, y a pesar de las numerosas disputas entre los Reyes y los Papas, la Iglesia siempre ha apoyado el concepto de gobierno monárquico. Incluso en los tiempos modernos, los Papas han dado pruebas de sus sentimientos monárquicos (ej. Pío XII). Que la Monarquía y el Cristianismo deberían haber ido siempre de la mano no es de extrañar, la Iglesia misma es una organización Monárquico-Jerárquica en la que la autoridad es dada de arriba a abajo en lugar de subir desde abajo; y Cristo es el Rey de Reyes. De hecho, es muy dudoso que el Reinado de Cristo sea reconocido efectivamente en una sociedad cuyo pensamiento ha sido condicionado a aborrecer la misma idea de Realeza.

3. EL LIBERALISMO

El Liberalismo, como filosofía política (y no política de partidos), se basa en el Racionalismo, es decir, en la creencia de que la razón humana puede llegar a la verdad sin la ayuda de la revelación divina. En su sentido original, el Nacionalismo no es necesariamente ateo, no siempre profesa hostilidad a la revelación divina, sino simplemente la independencia de ella. Ya que, de acuerdo con sus premisas, la razón humana puede llegar a la verdad sin ayuda, lo que sigue naturalmente es que el hombre debe ser libre, es decir, libre de hacer lo que su razón le dice que es correcto. Por lo tanto, el nacimiento del Liberalismo. Como se verá más adelante, el concepto de la racionalidad y libertad del hombre es eminentemente Cristiano, pero en un sentido totalmente diferente, y esta ambigüedad, que siempre ha sido cultivada por los enemigos de Dios, ha sido responsable de muchos grandes males.

4. LA DEMOCRACIA Y EL CAPITALISMO

La filosofía del Liberalismo ha dado a luz a un sistema político: la Democracia, y a un sistema económico: el Capitalismo. En ambos sistemas, la libertad de acción y expresión es el pilar, y ambas se basan en el juicio privado de las personas, sin consideraciones derivadas de la revelación divina. No es difícil ver, por lo tanto, a que abusos estos sistemas pueden llevar: los valores morales no son considerados. Si todavía existen, no son más que un legado de la tradición Cristiana, cuya desaparición completa es sólo una cuestión de tiempo. Una vez que los valores morales hayan desaparecido totalmente, no se establecerán límites a las pretensiones del hombre, nada va a frenar sus ansias de libertad completa: la anarquía y el derramamiento de sangre son su inevitable resultado. Pero, antes de llegar a esa etapa final, leyes son promulgadas, que son cada vez más permisivas, ya que, según el credo liberal, las leyes deben reflejar la voluntad del consenso. Por lo tanto, los males tales como el divorcio, el aborto, la eutanasia y la homosexualidad se hicieron legales. Tan prematuramente como hace 100 años, muchos pensadores pronosticaron lo que estamos presenciando. Pero sus advertencias no fueron escuchadas, si no puestas en ridículo, y el hombre moderno continuó su camino democrático hacia el caos y la anarquía.

5. EL SOCIALISMO Y EL COLECTIVISMO

El Marxismo también tiene un sistema: Socialismo que conduce al Comunismo. El verdadero Comunismo es probablemente imposible de lograr, aunque se intentó en China. Rusia es realmente un país Socialista. El Marxismo tiene un sistema económico: el Colectivismo. Básicamente, sin embargo, no hay diferencia intrínseca entre el Socialismo y la Democracia (que es lo que intentaré demostrar a continuación). Las diferencias radican sólo en los métodos utilizados, y estos métodos están obligados a converger, están, de hecho, ya convergiendo. El Colectivismo no es más que un Capitalismo de Estado, una forma mucho peor que en Occidente. En resumen, la Democracia y el Socialismo están tratando de crear la Ciudad del Hombre. Estos son los descendientes de los mismos errores, la creencia en el hombre y el rechazo de Dios. "La mayor locura de nuestra época consiste en tratar de construir un orden temporal duradero y fructífero sin la única base sobre la que puede soportarse, es decir, Dios." (Juan XXIII, "Mater et Magistra") Una Democracia Cristiana es sólo un sueño, de hecho, una contradicción de términos como se verá más adelante. La Ciudad de Dios no se puede construir más que en un orden monárquico, ya que, "Tal fue la constitución establecida por la ley divina, pues Moisés y sus sucesores gobernaban al pueblo, gozando de un poder singular, lo que equivalía a una especie de monarquía." ("Suma teológica", Parte I-II, c. 105)

6. ¿QUÉ ES LA DEMOCRACIA?

Es necesario en primer lugar entender exactamente lo que la palabra "democracia" significa. Hablando estrictamente, democracia significa "gobierno por el pueblo". Es en este sentido político en el que se utiliza generalmente. Sin embargo, posee un significado secundario, y este es, "movimiento de benevolencia para beneficio del pueblo". Esto no tiene ninguna implicación política, sólo denota una conciencia social sobre las necesidades de la gente. Podría también ser encontrado en, por ejemplo, una Monarquía absoluta (Cf. Pío XII, Mensaje de Navidad de 1944). Pero sería un nombre más apropiado "demofilia" (amor por el pueblo). Es en este último sentido es que León XIII y Pío XII utilizaron la palabra "democracia" en sus encíclicas. En vista de esto, estas encíclicas no pueden citarse para justificar la democracia política. Para ello se tendría que ignorar lo que la enseñanza de los Papas expresa: "Muchos encuentran el término Democracia Cristiana objetable. Ellos sostienen que encierra algo ambiguo y peligroso: temiendo, en efecto, que por este nombre bajo encubierto interés fomente el gobierno popular, y que menosprecie otros métodos de administración política… Bajo la sombra de su nombre, se podría fácilmente esconder el propósito de atacar a todo poder legítimo ya sea civil o sagrado... Sería un crimen distorsionar este nombre de Democracia Cristiana a política, pues aunque la democracia implica el gobierno popular, sin embargo, en su aplicación actual debe ser empleada para que, quitando de ella todo significado político, únicamente signifique la acción benéfica Cristiana en favor del pueblo... Esto es lo que los católicos han de pensar sobre este asunto." (León XIII, "Graves de Communi") (Las citas de Pío XII se darán más adelante.)

7. EL ORIGEN DE LA DEMOCRACIA


La democracia no es algo nuevo, es heredado de Grecia y Roma. Algunas ciudades-estado en la Edad Media tenían constituciones democráticas y muchas herejías Cristianas fueron inspiradas por una visión democrática equivocada. Finalmente encontró su camino en Inglaterra, donde comenzó a adquirir su forma moderna (ver abajo). Filósofos franceses la trajeron de Inglaterra en el siglo 18 y perfeccionaron su forma moderna, con especial énfasis en la emancipación de toda autoridad que no se basa en la voluntad popular, especialmente la autoridad religiosa. Durante las guerras napoleónicas, se extendió de Francia a toda Europa, y, finalmente, a todo el mundo a través de la colonización. El tipo de democracia Inglesa y Americana era algo diferente de la practicada en el continente, pero fue cada vez más influenciada por las formas continentales.

8. LOS DOS CONCEPTOS DE DEMOCRACIA

La democracia tradicional se consideraba como una forma posible, entre muchas otras, de designar líderes. Se consideraba rara vez como auto-suficiente, y nunca como un sistema político excluyente. En la democracia tradicional, las personas designaban líderes, pero no formulaban políticas, dejándoselas a sus líderes, en los cuales ponían toda su confianza. Reyes, magistrados, incluso Obispos, han sido elegidos de esta manera. Pero, una vez elegidos, tenían poderes efectivos; ellos fueron verdaderos líderes, no sólo representantes del pueblo. Un líder toma iniciativas y asume responsabilidades, mientras que un representante, hablando estrictamente, no toma ninguna decisión propia, siendo sólo el portavoz del pueblo o del partido. La democracia Moderna, por otra parte, es considerada como el único medio legítimo para designar líderes (véase las citas de arriba). Dice ser autosuficiente, rechaza todos los demás sistemas políticos como si fueran contrarios a la justicia, y da a la gente, o a los partidos políticos, el derecho de dictar las normas. Ya no es exclusivamente un sistema de designación que, por circunstancias propias de tiempos y lugares, puede ser preferible a otros sistemas, es un régimen exclusivo, reclamando derechos absolutos. Cualquier sugerencia de su posible supresión se considera absurda y contraria a la justicia humana básica. La democracia tradicional era un derecho revocable, total o parcialmente concedido - o retirado, de acuerdo a las necesidades del momento; pero la democracia moderna es considerada como un derecho inalienable, la fuente única de la justicia política, legalidad y autoridad.

9. LA DEMOCRACIA COMO LA FUENTE DE LA AUTORIDAD


En su forma moderna, la democracia es absoluta. Cualquier ley que no se basa en la voluntad popular es considerada como tiránica, y cualquier ley basada en la voluntad popular no puede ser sospechosa de ser tiránica. La posible "tiranía de las masas" es un concepto bastante ajeno al pensamiento democrático moderno. Al contrario, la palabra democracia se ha convertido en un sinónimo de libertad, mientras que en realidad la tiranía o la libertad indiferentemente pueden encontrarse o no en la democracia. La democracia moderna se ha convertido en un fin en sí misma, un criterio de verdad y bondad, una mística, una superstición. Se trata de "un criterio de juicios, una teoría del conocimiento, un método, un principio, un objetivo, un ideal, una forma de vida, una cuestión de fe." (C.B. Carson) Las personas se convierten en el único juez de lo que es bueno y malo, justo o injusto. La Ley Natural, y en especial la Ley Divina, no tienen cabida en el concepto moderno de la democracia. La democracia moderna no nació en la mente de hombres temerosos de Dios, sino en las mentes de los llamados filósofos que habían abjurado ya su fe Cristiana, y rechazado la Filosofía Cristiana. De ello se desprende que muchos principios de la democracia moderna son contrarios a la doctrina Cristiana, algo que los Papas han subrayado en repetidas ocasiones. En todas las democracias modernas, sin excepciones, los principios Cristianos son continuamente pisoteados, y los valores Cristianos sustituidos por ideas hechas por hombres.

10. LAS DOS FORMAS DE DEMOCRACIA MODERNA

La democracia moderna puede ser directa o indirecta. Es directa cuando el pueblo elige a su líder supremo en las elecciones generales. Es indirecta cuando el líder supremo o un grupo de líderes son elegidos por una Asamblea que a su vez es elegida por el pueblo. La democracia directa es a menudo dictatorial y tiránica. La democracia indirecta, por otro lado, está abierta a peleas e intrigas de partidos, y carece de autoridad efectiva. Ambas formas de democracia moderna niegan a la otra el derecho a llamarse a sí misma una democracia: la democracia indirecta, se dice que es plutocrática, y la democracia directa se dice que es fascista. Ambas acusaciones son justificadas.

11. ¿QUÉ ES "EL GOBIERNO DEL PUEBLO"?

Si la democracia es el "gobierno del pueblo", falta mostrar lo que este término puede transmitir. Puede significar "dominio absoluto de la mayoría" o puede significar "participación popular en los asuntos del Estado", sin necesariamente involucrar el mando absoluto de la mayoría, ni tampoco si quiera un dominio popular en su sentido estricto. Hemos visto lo que las ideas modernas están considerando. Santo Tomás de Aquino, sin embargo, tenía una concepción bastante diferente de la democracia. Él dijo que: "las personas tienen derecho a elegir a sus gobernantes," y también dijo que: "los gobernantes pueden ser elegidos de la gente", pero nunca consideró el mando de la mayoría. No veía la democracia como un credo político o como un sistema completo y auto-suficiente para encontrar en sí misma la justificación para cualquier tipo de legislación, sino más bien como un conjunto de instituciones dentro de una estructura monárquico-jerárquica. La gente tiene, en efecto, el derecho a elegir a sus gobernantes, porque si no fuera así, podrían ser gobernados contra sus propios deseos. La gente también debería poder proporcionar gobernantes de entre ellos mismos, y no sólo elegirlos de una clase alta, ya que es de la gente, en definitiva, que la vida de la nación se renueva. La enseñanza de Santo Tomás es por lo tanto, eminentemente racional, y dejó en claro que: "tal era la forma de gobierno establecida por la Ley Divina. Pues esta es la mejor forma de organización política, siendo en parte Reino, ya que hay una cabeza de todos; en parte aristocracia, en la medida en que un número de personas son puestas en autoridad; en parte democracia, es decir, gobierno por el pueblo, en la medida en que los gobernantes pueden ser elegidos del pueblo, y el pueblo tiene el derecho a elegir a sus gobernantes." ("Suma teológica", Parte I-II, c. 105)

12. CÓMO LOS GOBERNANTES PUEDEN SER ELEGIDOS DEL PUEBLO Y POR EL PUEBLO

Santo Tomás da una serie de referencias bíblicas que dejan claro que la autoridad no se ejerce por el pueblo. Las personas solo designan a los gobernantes, pero no los imponen, porque el nombramiento definitivo de los gobernantes designados por el pueblo descansa en la autoridad superior. Este procedimiento democrático que, como veremos, ha sido explicado de diversas maneras en las Encíclicas Papales, está muy lejos de las ideas modernas de soberanía popular. "Busquen, pues, entre ustedes hombres sabios, perspicaces y experimentados de cada una de sus tribus, y yo los pondré al frente del pueblo." (Deuteronomio, cap. 1, ver. 13) Una referencia similar se puede encontrar en Éxodo 18:25, lo cual muestra que el mismo Moisés, como gobernante supremo de los Judíos, nombró gobernantes menores designados por el pueblo. Los papas modernos, en particular Pío IX, León XIII, San Pío X y Pío XII, han reafirmado que la autoridad viene de arriba, es decir, de Dios, y es transmitida hacia abajo en lugar de ascender de la gente. La gente solo designa líderes.

13. LA VERDADERA DEMOCRACIA ES BUENA

Como ya ha sido explicado, el principio básico de la democracia, la designación de los gobernantes del pueblo y por el pueblo, es bueno y razonable. Pero incluso entonces, su uso es limitado. Por otra parte, es dentro de una estructura jerárquica y monárquica que funciona mejor. La designación de los gobernantes no se puede equiparar con la concesión de autoridad; este es el error de los filósofos agnósticos del siglo 18, y que ahora se acepta ampliamente, incluso entre Cristianos.


PARTE II. CONCEPTOS ESPECÍFICOS

14. LA FUENTE DE LA AUTORIDAD

Que el concepto de la soberanía popular se extendió por filósofos que habían perdido su fe Cristiana es un punto importante que no debe de pasarse por alto. Dios es el único verdadero Soberano del Universo. Como tal, Él es la única fuente de la autoridad. Y Cristo, el Hijo de Dios, el Rey de Reyes, era la única persona facultada para administrarla. Él se la ha delegado a los obispos. De los obispos, la autoridad fluyó a los Reyes a través de las ceremonias de coronación y la unción, y luego a los gobernantes temporales designados por los Reyes. Moisés también recibió la autoridad directamente de Dios y se la pasó en menor medida a los gobernantes que fueron designados por el pueblo. Sin embargo, cuando la autoridad de Dios es rechazada, y el Reinado de Cristo ya no es reconocido, la fuente de la autoridad hay que buscarla en otra parte. Los filósofos del siglo 18 la pusieron en el hombre, y este nuevo concepto, es decir, la soberanía popular, es la base de la Democracia Moderna. Es un concepto totalmente contrario a la doctrina cristiana: "El Sillon (los Cristianos Demócratas de 1910) sobre todo pone la autoridad pública en la gente, la cual luego desemboca en el gobierno de tal manera, sin embargo, que continúa residiendo en el pueblo."Sin embargo, León XIII condenó absolutamente esta doctrina en su Encíclica "Diuturnum illud" sobre el gobierno político, en el que dijo: "Muchos de nuestros contemporáneos, siguiendo las huellas de aquellos que en el siglo pasado se dieron a sí mismos el nombre de filósofos, afirman que todo poder viene del pueblo. Por lo cual, los que ejercen el poder no lo ejercen con su propia autoridad, sino con una autoridad delegada por el pueblo y con la condición de que la misma voluntad popular que entregó el poder puede revocarlo a su antojo. Todo lo contrario es el sentimiento de los Católicos que sostienen que el derecho de gobernar emana de Dios como su principio natural y necesario." Cierto es que el Sillon sostiene que la autoridad - la cual primero sitúa en el pueblo - desciende de Dios, pero de tal manera que va de abajo hacia arriba, mientras que en la organización de la Iglesia, el poder desciende de arriba hacia abajo. Pero además de ser anormal para la delegación del poder ascender, ya que está en su naturaleza descender, León XIII refutó de antemano el intento de reconciliar la doctrina Católica con el error del filosofismo. Porque, continúa: "Es necesario señalar aquí que los que presiden el gobierno de los asuntos públicos pueden, en efecto, en ciertos casos, ser elegidos por la voluntad y el juicio de la multitud sin repugnancia u oposición a la doctrina Católica. Pero mientras que esta opción etiqueta al gobernador, no le confiere la autoridad para gobernar; no delega el poder, sino designa a la persona que será investida con él. De por sí, si el pueblo conserva el poder, ¿qué hay de la autoridad? Una sombra, un mito; no hay ya ley propiamente dicha, no existe ya la obediencia" (San Pío X, "Nuestro Mandato Apostólico", 25 de agosto de 1910) (El énfasis es mío) Para resumir este pasaje:.. 1) La autoridad viene de Dios 2) La autoridad no reside en la comunidad 3) La Autoridad (por lo tanto) no proviene de la comunidad. 4) (Más específicamente), la autoridad del gobierno no viene de la comunidad. 5) La autoridad tampoco (siquiera) fluye de Dios a la Comunidad. 6) La autoridad (por lo tanto) no puede fluir de la comunidad al gobierno. 7) El gobierno puede, en algunos casos, ser elegido por la comunidad. 8) Sin embargo esta elección no le confiere autoridad sobre el gobierno. 9) Solo designa a los que se investirán con ella . 10) La comunidad no puede retener la autoridad (suponiendo que la tuviera en primer lugar). 11) Cualquier reclamación en contra es absolutamente condenada, y constituye un intento de reconciliar la doctrina Católica con el error del filosofismo. Este puede ser un duro golpe para muchos sinceros Cristianos Demócratas que han sido influenciados por ideas modernas, sin embargo, la doctrina de la Iglesia como es explicada por San Pío X y León XIII no deja lugar a duda ni a interpretaciones engañosas. Además, también es confirmada por otros Papas: "ciertos hombres, despreciando en absoluto y dejando a un lado los principios más firmes de la sana razón, se atreven a proclamar que la voluntad del pueblo manifestada por la llamada opinión pública o de otro modo, constituye una suprema ley." (Pío IX "Quanta cura") "En materia política y económica, las leyes... no son determinadas por los deseos engañosos de la multitud, sino por la verdad y la justicia; la autoridad de los gobernantes está investida de un carácter sagrado más que humano." (León XIII "Immortale Dei")
"La vida de las naciones está desintegrándose a través de un culto ciego por la fuerza de los números. Cada ciudadano es ahora un votante, pero... como tal, no es más que una unidad de un número que constituye a la mayoría. Su posición, su lugar en la familia o en las profesiones no son tomados en cuenta." (Pío XII - Mensaje del 6 de abril 1951) El gobierno de la mayoría resulta en sociocracia, en la que la Sociedad, vista como un organismo físico, tiene precedencia sobre los seres humanos. La Democracia Moderna conduce a ello, porque pone la autoridad en las masas.

15. ¿ES EL HOMBRE LIBRE, PENSANTE Y RESPONSABLE?

La democracia moderna dice que si lo es. En un sentido es cierto. El hombre es libre, pensante y responsable en esencia. Es libre porque Dios le dio libre albedrío. Es pensante porque Dios le dio una inteligencia capaz de lidiar con ideas abstractas contrario a los animales que pueden pensar sólo acerca de realidades concretas. Es responsable como consecuencia de su libertad y sus facultades mentales. Pero estas tres cualidades son sólo posibilidades. En realidad, el hombre promedio es cualquier cosa excepto libre, pensante y responsable. Es indispensable diferenciar entre lo Objetivo (o Esencial) y lo Subjetivo (o Circunstancial). El fallar a hacer esto está en la raíz de muchas falacias peligrosas. Un sistema político (circunstancial por necesidad) no se puede construir sobre las premisas absolutas de la libertad, inteligencia y responsabilidad del hombre. El hombre no es totalmente libre, porque a menudo es esclavo de sus pasiones. Siendo esclavo de sus pasiones, no puede ser plenamente responsable. Estando empañado por emociones, su juicio no puede ser totalmente fiable. Un sistema que da la soberanía a los miembros menos pensantes y responsables de la comunidad está destinado a ser el menos deseable. "...la prudencia lábil y pobre del hombre..." (Pío XII "Summi Pontificatus") "Quien desea que la estrella de la paz aparezca y se detenga sobre la sociedad humana... opóngase a la excesiva aglomeración de los hombres, casi a manera de masas sin alma; a su excesiva dependencia en el instinto y la emoción; a su falta de sólidos principios y de fuertes convicciones; a su sobreabundancia de excitaciones instintivas y sensibles y a su volubilidad." (Pío XII, "Mensaje de Navidad de 1942") "Sería vano esperar que este juicio prudente, dictado por la experiencia de la historia y por un profundo sentido político, sea, o generalmente aceptado por la opinión pública, o aun únicamente por la mayoría." (Pío XII, "Mensaje de Navidad de 1944") "La razón humana (no) es el único juez de lo verdadero y de lo falso, del bien y del mal." (Pío IX "Maxima Quidem") De ello se desprende que el pueblo debe ser guiado y no ser el guía. "Según él (el Sillon), el hombre no será verdaderamente hombre, digno de este nombre, más que el día en que haya adquirido una conciencia luminosa, fuerte, independiente, autónoma, pudiendo prescindir de todo maestro, no obedeciendo más que a sí mismo, y capaz de asumir y de cumplir sin falta las más graves responsabilidades." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") Aquí está nuestro "hombre libre, pensante y responsable". ¿Y qué pensó el Papa acerca de esto? "Grandilocuentes palabras, con las que se exalta el sentimiento del orgullo humano; sueño que arrastra al hombre sin luz, sin guía y sin auxilios por el camino de la ilusión..." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico")

16. ¿PUEDE EL HOMBRE SER LIBRE, PENSANTE Y RESPONSABLE?

Un reclamo común hecho por demócratas modernos es que el hombre puede ser "educado" para ser realmente libre, pensante, y responsable. Vamos a ver lo que los Papas piensan sobre esto: "¿cuándo vendrá este gran día? A menos que cambie la naturaleza humana (cosa que no está al alcance del Sillon), ¿vendrá ese día alguna vez? Tal es, en resumen, la teoría, se podría decir, el sueño, del Sillon; a esto tiende su enseñanza, y lo que llama educación democrática del pueblo..." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") "(El objetivo de esta educación) es más bien inducirlos (a los niños), y despertar en ellos, por todos los medios posibles una especie de sentido cívico, el cual se tiene como indispensable para el futuro político del país." (Pío XII "Summi Pontificatus")

17. LA LIBERTAD CRISTIANA Y LA LIBERTAD DEMOCRÁTICA

Utilizadas libremente, las palabras pueden ser engañosas. Es importante señalar que la Libertad puede tener dos significados diferentes. En el sentido Cristiano la libertad es la facultad de elegir entre diferentes cursos de acción; esto es el libre albedrío, opuesto con el determinismo mecanicista de la materia inerte, o el automatismo instintivo de los animales. Pero el libre albedrío del hombre está moralmente ligado por ciertas leyes inmutables de origen divino. El libre albedrío es, en realidad, la libertad de elegir entre la obediencia y la rebelión; nuestro deber es evidentemente el de elegir la obediencia a la autoridad de Dios. Por eso Pío XII, refiriéndose a la trilogía "Libertad, Igualdad y Fraternidad" dijo que las libertad es un deber: " ¡qué espectáculo presenta un Estado democrático dejado al arbitrio de las masas! La libertad, de deber moral de la persona se transforma en una pretensión tiránica de desahogar libremente los impulsos y apetitos humanos a cualquier costo o perjuicio de los demás". (Pío XII - Navidad de 1944) En esta alocución sobre la democracia, que fue extensamente mal entendida, Pío XII también explicó que la libertad de los ciudadanos del Estado moderno debería ser: "Ellos (los ciudadanos) tendrán plena libertad para manifestar su parecer sobre los deberes y los sacrificios que se le imponen." Deberes y sacrificios, dijo el Papa; pero la democracia moderna insiste en los derechos y privilegios... Para manifestar su parecer dijo el Papa, pero la democracia moderna sostiene que los ciudadanos tienen el derecho de dictar su parecer... Estas son las significativas diferencias. Todavía hay una implicación más profunda en esta pregunta sobre la libertad: si la libertad de elección realmente implica la obediencia a la ley moral. Y si la obediencia a la ley moral da la verdadera libertad, se deduce que la alternativa, es decir la rebelión, sólo puede resultar en tiranía. En efecto, la Jerarquía Angélica es perfectamente libre, porque los Ángeles son perfectamente obedientes a Dios, su Rey y Padre. Su obediencia voluntaria les da libertad. La compulsión surge sólo cuando la obediencia perfecta no existe. Pero la democracia moderna se opone a la libertad a la obediencia. Lo que llama libertad es, en efecto, una revuelta. Habiendo elegido la revuelta, sólo puede encontrar tiranía. Esta es la razón más profunda por la cual la democracia moderna evoluciona hacia el Socialismo: el elemento de compulsión inherente en el Socialismo se hace necesario por la falta de obediencia voluntaria, (para poner sólo un ejemplo, nacionalizaciones pueden ser necesarias porque los Capitalistas, que son movidos por la codicia, no observan ciertos principios morales voluntariamente). La libertad cristiana, por lo tanto, es la facultad verdadera de elegir entre diferentes cursos de acción, pero no la libertad moral de hacerlo. En el sentido liberal, la libertad es una completa emancipación de las restricciones morales, la negativa a reconocer cualquier ley superior, la afirmación de que el hombre sólo está limitado por las leyes que él mismo hace. Tal creencia puede tener consecuencias de gran alcance, y si las democracias occidentales todavía no han llegado a una etapa de anarquía total, esto se debe a que los pueblos de Occidente todavía están influidos por la tradición Cristiana. Pero el hecho es que este concepto de libertad es una rebelión contra las leyes hechas por Dios, una rebelión contra Dios mismo. Puesto que la democracia moderna tiene sus raíces en el Liberalismo, también es una rebelión contra Dios. Las leyes del divorcio son un ejemplo de ello. Como todas las leyes hechas por el hombre pueden ser cambiadas de acuerdo a los caprichos del hombre, a modo de sufragio, hasta la santidad del matrimonio ha sido completamente destruida. En otros campos, los negocios en particular, hemos visto que esta completa libertad a veces puede ser rota por medidas arbitrarias, como las nacionalizaciones, y, por lo tanto, la libertad termina en tiranía. Considerando ahora la implicación más profunda tal como hemos hecho en el caso del concepto Cristiano de la libertad, nos encontramos una vez más que la libertad, en el sentido liberal, siendo esencialmente una revuelta, termina en la tiranía a través de un proceso muy diferente también: la obediencia a Dios es la verdadera libertad, la rebelión contra Dios es la tiranía. ¿Cómo puede pasar esto? Cuando todas las leyes superiores son rechazadas, la libertad se convierte esencialmente egoísta. Es la libertad de los instintos, la de los animales, y, finalmente, el sometimiento total de sí mismo a impulsos internos. Dado que los deseos nunca pueden ser satisfechos, esta tiranía no tiene límites. Los animales, por supuesto, no están sometidos a la tiranía, porque sus instintos sólo existen en relación a sus necesidades reales. Pero el hombre, como animal pensante, tiene imaginación, su impulsos internos son imaginarios, así como instintivos. Eso es de lo que los promotores de las ideas liberales no se dieron cuenta en su entusiasmo por el estado animal: "Los animales tienen la ventaja natural sobre nosotros en su independencia ... en ese estado salvaje y natural apreciado por los cuadrúpedos, aves y reptiles, el hombre sería tan feliz como ellos." (Voltaire)

18. LIBERTAD, IGUALDAD, FRATERNIDAD

Lo que la democracia moderna llama libertad es una demanda tiránica de libertad. El ideal de la Igualdad no es menos engañoso: es cierto que todos los hombres son iguales en esencia, y que todos tienen que ser juzgados por Dios, pero no son iguales en mérito y no serán iguales en gloria; no son iguales en conocimiento, inteligencia, sentido común y sabiduría; no deberían, por lo tanto, tener iguales derechos civiles. No sólo es insensato para la nación en su conjunto dar iguales derechos civiles a todos, también es injusto para los ciudadanos menos dotados: un derecho civil implica una responsabilidad correspondiente, y estos ciudadanos son, de hecho requeridos a asumir una responsabilidad fuera de su competencia. El voto obligatorio es un ejemplo de esto. ¡Es completamente absurdo darle a un peón un poder de voto igual al de un profesor de Ciencias Políticas! Sin embargo, eso es lo que está sucediendo. A nivel nacional, el resultado sólo puede ser desastroso. El Igualitarismo, encima hace que todas las desigualdades parezcan injustas, intolerables, incluso inmorales. Lejos de llenar los corazones de los hombres con satisfacción, produce frustración, infelicidad, envidia y odio, con los males sociales resultantes. El Igualitarismo pasa por alto un hecho importante, es decir, que todos los hombres necesitan a alguien que puedan mirar en busca de inspiración, orientación o consuelo. Hacer a todos los hombres iguales frustra esta necesidad básica e innata. "Y he aquí la (supuesta) grandeza y la nobleza humana ideal (supuestamente) realizada por la célebre trilogía Libertad, Igualdad, Fraternidad... una teoría contraria a la verdad Católica y que falsea las nociones esenciales y fundamentales que regulan las relaciones sociales de toda sociedad humana... Al separar la fraternidad de la caridad cristiana así entendida, la democracia, lejos de ser un progreso, constituiría un retroceso desastroso para la civilización." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") (las palabras entre paréntesis se han añadido para mostrar el tono que es evidente en el contexto del pasaje.) "Es absolutamente falso, y mera palabrería, decir que todos los ciudadanos tienen los mismos derechos." (Pío XI, "Divini Redemptoris") "Esa igualdad con que sueñan, sería, en realidad, rebajar a todos a una condición por igual miserable y abyecta". (León XIII "Rerum Novarum") "Las masas... son el enemigo capital de la verdadera democracia y de su ideal de libertad y de igualdad". (Pío XII - Navidad de 1944) Este pasaje parece dar la impresión de que Pío XII apoyó el ideal democrático de libertad e igualdad, que fue condenado por León XIII, San Pío X, Pío XI, y otros papas citados aquí. No es necesario decir que tal contradicción no es real. Pío XII tuvo mucho cuidado en detalles, diciendo que "la Libertad es un deber", y que la Igualdad es un derecho igual para todos a vivir en conformidad con su estado de vida. Esto no es lo que los filosofastros del siglo 18 dijeron e incluso cuando los demócratas modernos no repudiaron abiertamente lo que el Papa dijo, sin duda pusieron un énfasis muy diferente en las palabras "Libertad, Igualdad". "En un pueblo digno de tal nombre, todas las desigualdades que proceden no del arbitrio sino de la naturaleza misma de las cosas,... no son de ninguna manera obstáculo a la existencia y al predominio de un auténtico espíritu de comunidad y de fraternidad. Más aún, esas desigualdades, lejos de lesionar en manera alguna la igualdad civil, le dan su significado legítimo, es decir, que ante el Estado cada uno tiene el derecho de vivir honradamente su existencia personal, en el puesto y en las condiciones en que los designios y la disposición de la Providencia lo han colocado." (Pío XII" mensaje de Navidad de 1944") Por cierto, este pasaje es un recordatorio de que las desigualdades no son un obstáculo para la verdadera Fraternidad (hermandad). Demócratas modernos sostienen, por el contrario, que la fraternidad sólo puede lograrse cuando todos los hombres tienen los mismos derechos en todos los aspectos. Aún más, la Fraternidad, sin la caridad Cristiana es sólo un mito. Así que, ¿por qué no volver al viejo concepto de la Caridad y dejar la Fraternidad, su sustituto sin Dios?

19. LA SEPARACIÓN DE LA IGLESIA Y EL ESTADO

La separación de la Iglesia y el Estado es injusta y desastrosa. Es un paso hacia atrás que sólo puede tener las peores consecuencias en el futuro de la civilización. El Estado debe sacar su fuerza de la Iglesia. Un Estado separado de la Iglesia es como un hombre separado de Dios. "El Estado no se puede construir a menos que la Iglesia ponga los cimientos y supervise el trabajo... No se puede construir una sociedad sin Dios". (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") Ya en el siglo 18, Pío VI, en "Caritas Quae", habló de - "la furia del llamado Estado Llano... (autor) de esa funesta constitución cortada y separada de la Religión Católica." En "Quanta Cura", Pío IX habló de "las opiniones falsas y perversas, que tanto más se han de detestar cuanto que tienden a impedir y aun suprimir el poder saludable que hasta el final de los siglos debe ejercer libremente la Iglesia Católica por institución y mandato de su divino Fundador, así sobre los hombres en particular como sobre las naciones, pueblos y gobernantes supremos; errores que tratan, igualmente, de destruir la unión y la mutua concordia entre el Sacerdocio y el Imperio." En "Ad Apostolicae" él dijo que era un error creer que: "En el caso de leyes contradictorias la ley civil debe prevalecer (sobre la de la Iglesia)" Y en "Acerbissimum", él condenó explícitamente la opinión de que: "la Iglesia debe estar separada del Estado, y el Estado de la Iglesia." Hoy, sin embargo, muchos católicos "liberales" o "progresistas" tienen tales puntos de vista, aparentemente sin saber que cuando la ley civil prevalece, la ley divina es cada vez más usurpada en un proceso inevitable, irresistible y gradual. Básicas libertades humanas entonces se pierden en el nombre de "la libertad". No olvidemos que los comunistas, también, hablan de "libertad" cuando creen que están libres de la superstición religiosa. No son necesariamente menos serios que el demócrata moderno de Occidente, que está convencido de que es una gran bendición estar libre de la "interferencia de la Iglesia" en todos los ámbitos de la vida, y en la educación en particular. El estado del mundo hoy en día es una prueba concluyente de que los Papas estaban en lo cierto. Ninguna mejora duradera se garantizará nunca en los asuntos nacionales e internacionales a menos que Iglesia y Estado se unan de nuevo. El Vaticano II en "Gaudium et Spes", no contradice esto, pero lo que dice no tiene la claridad de lo anterior, y se presta a falsas interpretaciones. Hace hincapié de la autonomía jurídica de la Iglesia y el Estado (que no se niega en los extractos anteriores), e ignora la obligación moral del Estado para seguir las enseñanzas de la Iglesia (que se pone de relieve más arriba). El Vaticano II si habla de "la cooperación entre Iglesia y Estado", pero al parecer en condiciones de igualdad, como si la Iglesia tuviera tanto que aprender del Estado con el fin de ejecutar sus asuntos, como el Estado tiene que aprender de Ella para manejar sus propios asuntos. Esto está muy lejos de la "supervisión" defendida por San Pío X. En muchos sentidos, el proceso de "supervisión" se ha invertido. Tomemos la educación; en un primer momento todas las escuelas estaban en manos de la Iglesia – lo que era muy adecuado ya que la Verdad viene de Dios y no puede estar divorciada de la Palabra de Dios. Pero la victoria de las ideas masónicas y liberales en general, y el aumento de agnósticos y ateos en el poder, produjo una nueva situación: el Estado creó su propio sistema educativo. ¡Hoy en día, el Estado supervisa la Educación Católica!. Esto, por supuesto, es intolerable, y no hay duda de que no se hubiera logrado en absoluto si la Jerarquía Católica se hubiera simplemente negado a cumplir con la Ley. De hecho, ningún gobierno puede darse el lujo de perder el voto Católico, y si en un gobierno en particular fueron lo suficientemente tontos como para hacerlo por el bien de sus principios sectarios, la oposición inmediatamente aprovecharía la oportunidad para profesar una política contraria. Con el tiempo, ambas partes reconocerían el derecho de la Iglesia a ser completamente independiente, pues las plataformas de los partidos cambian de generación en generación - y hasta de década en década.

20. COMPLETA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

La libertad de expresión, estrictamente hablando, no es igual a la libertad de opinión o creencia. Pero las opiniones por lo general tienden a expresarse, así que no se hará distinción aquí entre las dos. "(Es) absurdo y erróneo o, mejor dicho, locura (creer) que la libertad de conciencia es el derecho inalienable de todo ciudadano. Este pestilente error se abre paso, escudado en la inmoderada libertad de opiniones que, para ruina de la sociedad religiosa y de la civil, se extiende cada día más por todas partes... Debemos también tratar en este lugar la libertad de imprenta, nunca suficientemente condenada, si por tal se entiende el derecho de dar a la luz pública toda clase de escritos…" (Gregorio XVI "Mirari Vos") Dos años más tarde, el mismo Papa tuvo que listar de nuevo los puntos de doctrina que fueron atacados por los liberales: "...(hay) la necesidad de poner freno a la licencia que cunde en las opiniones y en las palabras... la condena de una absoluta libertad de conciencia ... " (Gregorio XVI "Singulari Nos") Es claro que la libertad de expresión no es ilimitada. La libertad de Prensa en particular es contrario a la doctrina Cristiana. El Concilio Vaticano II dice que el hombre tiene derecho a la libertad religiosa. Este cambio de actitud ha sido tratado de explicar a través de la llamada "evolución de valores" - un argumento poco convincente ya que un principio inmutable está implicado aquí, es decir, ¿tiene el Error los mismos derechos que la Verdad? La razón de esta aparente contradicción debe buscarse en otra parte. La pura verdad es que la Iglesia es ahora víctima - perseguida por los gobiernos Comunistas. Y como la Iglesia Católica es la verdadera Iglesia, tiene de hecho derecho a la libertad religiosa. Asimismo, como denominaciones no Católicas tienen al menos parte de la verdad, ellas también tienen derecho a la libertad religiosa en los Estados comunistas. Pero, ¿qué de su libertad en un estado no Comunista? Obviamente, no pueden ser forzadas fuera de la existencia. Su derecho jurídico para difundir sus doctrinas puede ser tolerado por razones de prudencia, pero no puede ser considerado como un derecho moral. No obstante, uno hubiera querido ver esta distinción formulada en el decreto del Vaticano II. Pero entonces, en la ausencia de un liderazgo autoritario, los Padres Conciliares, cuyas opiniones fueron conflictivas en muchas cuestiones, a menudo resuelven sus diferencias mediante compromiso y ambigüedad. (Ver "Dignitatis Humanae")

21. IGUAL COOPERACIÓN DE TODOS LOS CIUDADANOS

Este rápido estudio de errores democráticos modernos no estaría completo si no se dice una palabra o dos acerca de uno de los principios básicos de la democracia moderna, esto es, el derecho de todo ciudadano a cooperar en el esfuerzo común. San Pío X condenó “las alianzas peligrosas" hechas por algunos Católicos liberales. Condenó la sugerencia de que todos y cada uno, independientemente de sus creencias religiosas y filosóficas, deberían cooperar con los mismos derechos en la construcción de la civilización del mañana. Él explicó por qué esto era un error. "No hay verdadera civilización sin civilización moral, y no hay verdadera civilización moral sin la verdadera religión: esta es una verdad, demostrada, éste es un hecho histórico… las realizaciones prácticas revisten el carácter de las convicciones religiosas, de la misma manera que los miembros de un cuerpo hasta en sus últimas extremidades reciben su forma del principio vital que los anima… ¿Qué pensar de este llamamiento a todos los heterodoxos y a todos los incrédulos para probar la excelencia de sus convicciones sobre el terreno social?" (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") A lo largo de este pasaje (2 páginas completas), San Pío X explicó que este tipo de cooperación entre personas de distintas religiones y horizontes filosóficos sólo podría dar lugar a la creación de "algún tipo de nueva religión a la misma vez atea y humanista". Hizo hincapié en que solo los verdaderos Cristianos están calificados para construir la sociedad del mañana, y que deben hacerlo sin asociarse con infieles y no creyentes. Ellos deben tener un liderazgo total y completo, "que no busque riesgosas coaliciones y peligrosos compromisos". De ello se desprende que la constitución civil, no puede otorgar derechos iguales a todos los ciudadanos, ni puede permitir que todos los ciudadanos accedan a puestos de poder, de lo contrario no creyentes pronto manejarían todo el Estado. Entonces la organización del Estado debe ser modelada según la Organización de la Iglesia, para que los hombres tengan la misma orientación necesaria en los asuntos temporales como tienen, a través de la Iglesia, en los asuntos espirituales. Un Estado que se permite gobernar por las masas en lugar de controlarlas y orientarlas, es como un hombre que se deja dominar por sus pasiones e instintos.


PARTE III. SOBRE LOS EFECTOS DE LAS IDEAS MODERNAS

22. SOBERANÍA POPULAR

No es posible examinar en un artículo como éste todos los efectos de las ideas democráticas modernas. Podemos ver sólo unos pocos; son realmente innumerables. Sería un grave error creer que la Democracia moderna es un concepto político autosuficiente e independiente, y que no guarda relación con otros aspectos de la vida. Las ideas democráticas modernas tienen sus raíces en el Liberalismo y el Humanismo. Como tales, son el resultado de estados de ánimo, consecuencia de cierta filosofía que proyecta sus perversos efectos en todos los aspectos de nuestras vidas. Es inútil reconocer y luchar contra algunos de estos males mientras, al mismo tiempo, se esté alabando las supuestas virtudes del poder popular. Ambos derivan de la misma causa, y esa causa debe ser erradicada: es el espíritu de revuelta del siglo 18 "La revuelta general en las profundidades de la conciencia humana." (Pío XII "Summi Pontificatus"La democracia moderna es inseparable de otros males; ella inevitablemente se convierte en tiranía. Estos dos puntos principales han sido reconocidos por innumerables pensadores en todo el mundo. Cuando los números cuentan más que los individuos, cuando la comunidad cuenta más que las personas, cuando la sociedad es considerada como un fin para el cual el hombre existe, cuando es considerada como un objeto viviente cuyos intereses prevalecen sobre los intereses individuales, es seguro que resulte en tiranía tarde o temprano. Cuando se tienen todas estas creencias como verdades, se vuelve natural regular y condicionar a la persona humana para el supuesto beneficio de la comunidad. Se convierte en algo natural coordinar los esfuerzos individuales y la producción nacional, con poca consideración por la persona humana (sus planes); es natural también imponer o permitir prácticas médicas por la salud de la comunidad (fluoración del agua, rayos X y vacunas obligatorias); es natural "mejorar" la comunidad con el control de la natalidad y la eutanasia, o la inseminación artificial y la esterilización humana, etc. Tal vez se argumentará que hay poca conexión entre todas estas cosas. Pero si lo vemos con más atención, descubriremos que todos ellos son resultado de la misma perspectiva básica: el llamado bienestar de la comunidad; adecuar a la sociedad a las condiciones económicas en vez de adecuar las condiciones económicas a las necesidades de los individuos. En todos ellos, el concepto de la sociedad como un organismo físico y viviente es evidente, y este concepto es inseparable del mito de la soberanía popular, donde el hombre se convierte en una unidad insignificante dentro de la sumamente importante comunidad. No importa si la tiranía a la que algunos de estos males dan lugar se llame Burocracia, Plutocracia, Sociocracia, Tecnocracia, Fascismo, Socialismo o Comunismo, sigue siendo la misma tiranía y la única diferencia es una diferencia de énfasis. Todo tiene sus raíces en el Liberalismo y el Humanismo. Paradójicamente, el amor a la libertad se transforma en su antítesis. El Cristianismo alza a la persona humana a la más alta dignidad: la de un hijo de Dios llamado individualmente a la felicidad eterna. De ello se desprende que cualquier forma de sociedad que reduce a la persona humana a una simple unidad dentro de una masa, que considera la cantidad más importante que la calidad, que prefiere la opinión popular al juicio considerado de una élite, que sustituye las leyes y reglamentos complejos por un código moral, que da prioridad al Estado, y que somete a la persona humana a todo tipo de costumbres y prácticas des-humanizantes y despersonalizadas, es necesariamente anti-Crística. Como el Comunismo, aunque en menor medida y en menor grado, la democracia tiene la mayoría de las características anti-Crísticas: ansias de ilimitado poder material (el Anticristo va a querer crear cosas), el rechazo de Dios (Secularismo), y, por último pero no menos importante, la Democracia Moderna tiene tan amplio atractivo como para engañar a un gran número de los mismos elegidos. Estas ansias de poder y apariencia engañosa fueron señaladas por Pío XII. "... un orden social que, bajo una apariencia engañosa, o una máscara de fórmulas convencionales, esconde una debilidad fatal y una lujuria desenfrenada por lucro y poder." (Pío XII - Navidad de 1942) En cuanto a la tiranía, Platón señaló en la "República": "La democracia está fatalmente condenada a convertirse en tiranía." Aristóteles también hizo una observación similar. Esa es probablemente la razón por la que Santo Tomás de Aquino, que había estudiado a los dos autores, no era partidario de la democracia absoluta, sino sólo de las instituciones democráticas dentro de una estructura social monárquica (se entiende que el monarca debería tener autoridad real, y no ser una simple figura decorativa). En tiempos más recientes, San Pío X hizo un comentario similar acerca de la tiranía - "verdaderamente se puede afirmar que el Sillon (es decir, la Democracia) se ha hecho compañero de viaje del Socialismo". (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico")

23. LA OPINIÓN PÚBLICA Y LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Siendo el triunfo del juicio particular en vez del juicio de una élite, la Democracia Moderna es en la política lo que la Reforma fue en la religión. Tiene completa fe en la opinión pública, y afirma que la opinión pública es expresada por la prensa y el partido político, o los partidos. Es cierto que la opinión pública genuina debe, hasta cierto punto, ser capaz de darse a conocer; pero ningún partido político, al igual que la prensa, es la expresión tangible de ella. En su mejor caso, es la opinión de muy pocos. En su peor caso, completamente la forma y la manipula. "Las masas... se convierten en un juguete fácil en las manos de cualquiera que trate de explotar sus instintos e impresiones." (Pío XII – Navidad de 1944) Cuando el partido ha conseguido poner sus candidatos en el poder a través de tales medios, la Asamblea no es en absoluto la expresión tangible de la opinión pública genuina; se preocupa más por los intereses del partido en el poder que del bienestar de la gente. En una elección, la selección debe ser espontánea, cada candidato debería ser conocido personalmente por los votantes. De lo contrario, el principio democrático básico como se entiende en la Biblia y en la "Summa", se ha pervertido y viciado. La democracia genuina es incompatible con la existencia de partidos Políticos. Dr. Rumble reconoció esta verdad en una respuesta en la radio (Cf. "Catholic Weekly", 10/11/62), cuando señaló que incluso el mejor de los partidos políticos tenía que presentar un programa, no de acuerdo con los principios Cristianos, ¡sino de acuerdo con el atractivo que puede tener en la multitud! Este reconocimiento fue probablemente no intencionado, pero aunque el Dr. Rumble hubiera tenido la intención o no, esta es una denuncia al sistema de partidos. Pío XII dijo (Navidad de 1944) que "los que están en el poder deberían ser imparciales". Pero, ¿cómo podrían hombres que pertenecen a partidos políticos, posiblemente, ser imparciales? Pío XI señalaba que los regímenes representativos eran peligrosos. "conocido es de todos cuán fácilmente se prestan a intrigas entre facciones". (Pío XI "Ubi Arcano Dei") Una vez que un partido está en el poder, el Estado pasa a ser sólo un medio para promover sus ambiciones y las masas se convierten en el instrumento: "puede el mismo Estado, con el apoyo de las masas reducidas a no ser más que una simple maquina, imponer su arbitrio a la mejor parte del verdadero pueblo." (Pío XII - Navidad de 1944) El cardenal Pie señaló que el primer intento de sufragio universal (en la era Cristiana), resultó en la liberación de Barrabás y la condena de Cristo, una observación muy llamativa que justifica plenamente la advertencia 19 siglos más tarde hecha por León XIII, es decir, "las leyes… no son dictadas por el voto y el juicio falaces de la muchedumbre, sino por la verdad y la justicia." (Immortale Dei) En cuanto a San Pío X, fue aún más explícito cuando dijo: "En estas costumbres democráticas... reconoceréis, venerables hermanos, la causa oculta de los fallos disciplinarios con los cuales tan frecuentemente han tenido que reprochar al Sillon." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") "hay un error y un peligro en atar, por principio, el Catolicismo a una forma particular de gobierno; error y peligro que son tanto más grandes cuando se identifica la religión con un género de democracia cuyas doctrinas son erróneas." (San Pío X, ibíd.) (Tenga en cuenta que San Pío X se refería a la práctica de la Democracia Moderna como lo demuestra el Sillon, en 1910, - uno de los primeros movimientos para tratar de reconciliar el Cristianismo con la Democracia Moderna, pero el el Papa no tenía intención de condenar la práctica de la Democracia Tradicional como se entiende por Santo Tomás.)

24. LA DEMANDA ELEVADA DE LA RESPONSABILIDAD

La vida de los santos, la Imitación de Cristo, las enseñanzas de los grandes Doctores, de hecho, la totalidad de la literatura Católica devocional, didáctica, meditacional, exhortativa y homilética, nos dice que debemos tener cuidado de nuestros propios pensamientos, pues la sabiduría del Hombre no es la sabiduría de Dios; nos dice que debemos ser como niños en todo, y no decir que somos realmente maduros en ningún aspecto. Esta es la sabiduría Cristiana: nuestra libertad es una entrega; nuestro pensamiento es falible; nuestra madurez es imperfecta y abierta a interrogación. Es cierto que este es un ideal difícil, pero vale la pena trabajar por él. En oposición a ese ideal, la Democracia Moderna sostiene que somos "librepensadores y responsables": nuestra libertad no conoce ley moral, nuestra forma de pensar es la misma sabiduría, nuestra madurez es "adulta". "... Grandilocuentes palabras, con las que se exalta el sentimiento del orgullo humano..." (San Pío X) "Tal es la afirmación exagerada que ella (la Democracia) hace sobre la madurez moral del ciudadano." (Pío XII - Navidad de 1944) Tal es - "La revuelta general en las profundidades de la conciencia humana... la prudencia lábil y pobre del Hombre... se jacta del progreso cuando vuelve a caer en decadencia ..." (Pío XII "Summi Pontificatus") La Rebelión contra las leyes de Dios significa desastre. No hay ninguna otra causa que tener en cuenta para la decadencia de Occidente.

25. LA LIBERTAD EN GENERAL

Las opiniones conflictivas que existen en nuestra sociedad, lejos de ser "saludables" y "estimulantes", llevan a la esterilidad, las divisiones y disensiones. Se cancelan entre sí y se mantiene sólo la confusión y el desconcierto. El triunfo del juicio privado, y la creencia en la libre expresión conducen a la exteriorización desenfrenada de los bajos instintos, y la ilimitada y destructiva libertad de acción. El materialismo, la decadencia moral, la impiedad, la rivalidad y el odio generalizado, y eventualmente guerras y revoluciones, son el inevitable resultado. No es mera coincidencia que las rebeliones, golpes de estado y revueltas estallan alrededor del mundo. Ellos son sólo hitos en el camino del odio pavimentado con un amor desordenado por la libertad. La libertad en el sentido liberal de los filósofos del siglo 18 es un espejismo autodestructivo, bañado en sangre.


26. LA LIBERTAD DE OPINIÓN


La libertad de opinión, incluso antes de que sea expresada en palabras o traducida en acciones, es en sí algo mortal. Es verdad, la Democracia Moderna no ataca a los principios morales como tales, sino los convierte solo en una cuestión de opinión personal. No reconoce la existencia del orden moral – "una ley moral objetiva, absolutamente necesaria y universal y, por último, igual para todos." (Juan XXIII "Mater et Magistra") Todo es considerado como una "cuestión de opinión personal". Todas las opiniones, por lo tanto, son buenas y respetables. No hay verdad objetiva, no hay reglas fijas en el Arte; uno debe ser de "mente abierta"; uno debe "marchar con los tiempos". El resultado es una total confusión de la mente. Si no hay una Verdad Absoluta que trasciende la razón humana, la "verdad" de un hombre es tan válida como la "verdad" de otro, y terminamos teniendo tantas verdades como seres humanos. En estas condiciones, la lucha contra el analfabetismo, lejos de promover el entendimiento entre pueblos y naciones, sólo hará la discordia más general, al multiplicar el número de "verdades" humanas. La UNESCO, que es tan atea como su cuerpo-paternal, la ONU, está cayendo en este error. Más aún, si todas las opiniones son buenas y respetables, se deduce que, en efecto, deben ser respetadas - casi demasiado obvio para ser dicho. Pero si todas las opiniones y puntos de vista deben ser respetados, se abre la puerta a un compromiso, la conciliación y el apaciguamiento. Los EE.UU., que es el campeón de la Democracia moderna, ha seguido esta línea desde 1945 en su Política exterior, dejando que el Comunismo se extienda más y más, ya que cada nuevo acto de agresión puede ser resuelto por un "compromiso". Lamentablemente, el espacio no permite ni siquiera una breve revisión de la política Exterior Estadounidense, pero sin duda sería esclarecedor. No es exagerado decir que Occidente está cometiendo suicidio debido a las creencias equivocadas de sus estadistas.

27. LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN

Hemos visto que la libertad de opinión, por su negación de la Verdad Absoluta, fomenta la confusión en la mente de la persona pensante. Es por eso que en nuestros tiempos un gran número de intelectuales están completamente desconcertados y hacen las declaraciones más sorprendentes. Pero la libertad de expresión es aún más grave, ya que inyecta en las masas irreflexivas las opiniones contradictorias de los pocos pensadores, y los prepara para acciones destructivas, a menos que, a través del cansancio, promueva una apatía general en el pueblo. La libertad de expresión es también responsable de la inundación del mercado de libros con publicaciones objecionables. Por lo tanto, es en gran parte responsable de la reducción de las normas morales, la delincuencia juvenil y la criminalidad. Entonces, estos y otros males de la sociedad moderna se remontan a una creencia filosófica básicamente errónea. (La libertad de expresión fue condenada por Gregorio XVI por estos motivos; Cf. "Nunquam fore").

28. LA LIBERTAD DE ACCIÓN Y EL CAPITALISMO

Las consecuencias prácticas de la libertad de acción son tan variadas y numerosas que es imposible hablar de todas ellas en un solo párrafo. Tomemos como ejemplo la historia del Capitalismo, que se basa en "laissez-faire" (dejar actuar). El dinero es esencialmente un medio de intercambio, como tal, es un dispositivo humano necesario y legítimo, posesión que no es, ni lo que asegura, inmoral en sí (propiedad privada). "los hombres tienen un derecho natural a la propiedad privada de bienes, incluidos los de producción... A lo dicho ha de añadirse que el derecho de poseer privadamente bienes, incluidos los de carácter instrumental, lo confiere a cada hombre la naturaleza, y el Estado no es dueño en modo alguno de abolirlo." (Por ejemplo, a través de nacionalizaciones arbitrarias). (Juan XXIII "Mater et Magistra") Pero el Capitalismo cambia el uso del dinero para que sea un medio para producir más dinero. En circunstancias normales, el dinero es el resultado del trabajo. En el Capitalismo el dinero es el resultado del dinero y, por tanto, sustituye al trabajo. Esta perversión del dinero ha dado lugar a muchos abusos, y estos abusos, a su vez, han sido responsables de la aparición del Socialismo y el Comunismo. El Capitalismo se basa en la Libertad de acción, y en la suposición humanista de que la felicidad se puede lograr en la Tierra a través de una mejor y mayor producción de bienes materiales. Es la cría de ambos, del Liberalismo y el Racionalismo. Como tal, es el hermano gemelo de la Democracia Moderna y no puede ser separado de ella. El capitalismo artificialmente aumenta la producción con una total indiferencia hacia las necesidades reales de las personas. El capitalismo crea una "economía del fabricante", a detrimento de la "economía del consumidor", la cual es la única forma solvente de la economía. La producción tiene precedencia sobre toda consideración; y en lugar de servir al hombre, eventualmente hace al hombre un esclavo. "... ha sido construido un sistema que considera la ganancia como motivo principal del progreso económico, la competencia como ley suprema de la economía, y la propiedad privada de los medios de producción como un derecho absoluto, sin límites ni obligaciones sociales correspondientes. Este liberalismo desenfrenado que conduce a la dictadura, fue denunciado justamente por Pío XI como generador de «el imperialismo internacional del dinero». Tales manipulaciones indebidas nunca pueden ser suficientemente condenadas;  hay que decir una vez más que la economía está al servicio del hombre (Pablo VI "Populorum Progressio") Este pasaje ha sido mal entendido por algunos comentaristas contemporáneos, el Papa Pablo VI no condenó el uso del Capital, sino del Capitalismo Liberal. Él no condenó el afán de lucro, sino la prioridad absoluta que se le da sin tener en cuenta las necesidades reales de la gente. Él no condenó la propiedad privada, sino la ilimitada y exclusiva demanda de los propietarios. Menos aún el Papa defendió la propiedad estatal - incluso por implicación. La propiedad estatal, de hecho, no es la única alternativa posible luego de la propiedad privada en los medios de Producción. La propiedad pública defendida por Juan XXIII en "Mater et Magistra" es una tercera alternativa en la que "los asalariados son hechos partícipes de alguna manera en la propiedad, o la administración o los beneficios". Es claro, por lo tanto, que el Papa Pablo VI no contradice en este pasaje la enseñanza de sus predecesores. La demanda ilimitada de los propietarios es de hecho escandalosa cuando un magnate del petróleo puede ganar hasta 300.000 dólares al día gracias a sus inversiones, mientras que un hombre de familia que trabaja en una fábrica se muere de hambre con 80 dólares a la semana. La producción se considera como el bien supremo, es una necesidad imperiosa producir siempre más y más, y, por lo tanto, vender más y más. La publicidad entonces entra en juego, invadiendo la vida de la gente, deformando su juicio y creando "necesidades" inexistentes, con el fin de vender la siempre creciente producción. Esto es lo que podría llamarse el aspecto "productivo" del Capitalismo; su mala naturaleza es evidente, incluso si nos abstenemos de considerar aquí el hecho de que se inculca en las mentes de la gente una serie de falsos valores. Pero hay otro aspecto muy importante, el aspecto "especulativo", por así decirlo. El Capitalismo sólo puede funcionar porque el crédito es otorgado por los Bancos. Originalmente, los Bancos prestaban el dinero que era depositado en su caja fuerte, porque era evidente que una gran proporción de estos depósitos nunca eran retirados a la misma vez. Tal vez sólo el 10% de los depósitos se retirarían. Los bancos estaban por lo tanto en condiciones de prestar hasta el 90% de los depósitos existentes. Pero los propios préstamos fueron transferidos a menudo de Banco a Banco sin estar en circulación en efectivo. En un depósito de $ 1.000, se hace posible, por tanto prestar hasta $ 10.000 (por medio de anotaciones), ya que sólo el 10%, $ 1.000, estará en circulación real, y puesto que esta cifra es precisamente la que se depositó en primer lugar en efectivo. No es necesario decir que este es un resumen muy esquemático de los procedimientos bancarios, pero muestra que los créditos son en realidad dinero inexistente, y es más, ¡se cobran intereses por este dinero inexistente! Se conceden préstamos al gobierno de la misma manera, con el efecto de que la Deuda Nacional en algunos países ha aumentado constantemente, y que una gran proporción del dinero de los impuestos sobre la renta se emite -no para pagar la Deuda Nacional, ¡sino para servir a los intereses en ella! Para decirlo sin rodeos, el sudor y el trabajo de las personas se utiliza para engordar a las marionetas anónimas de las Finanzas Internacionales. El impuesto sobre la renta, por cierto, es un invento relativamente reciente, y algunos economistas dicen que podría ser fácilmente suprimido. Es de destacar también, que el costo de los bienes producidos debe incluir los intereses pagados a los Bancos, y por lo tanto es mayor que el poder adquisitivo de la fuerza de trabajo, con el efecto de que hay escasez en la abundancia, y se tiene a la gente en sujeción económica.
"Las leyes deben evitar que el trabajador sea condenado a una dependencia o esclavitud económica incompatible con sus derechos como persona." (Pío XII - Navidad de 1942) Esta esclavitud económica está a la raíz de las huelgas y el malestar social. Asimismo, la siempre creciente Deuda Nacional hace a la devaluación una necesidad recurrente que los gobiernos no pueden eludir, pero que desalienta el ahorro y trae miseria a las personas mayores, reduciéndolas a "la pobreza más abyecta, después de una vida de difíciles ahorros y trabajo duro." (Pío XII - Navidad de 1952) El espacio no permite hablar de las cuotas de negocios y las acciones, pero las conclusiones serían las mismas que las anteriores, es decir, que el Capitalismo es una verdadera tiranía. El Socialismo y el Comunismo están empeñados en la destrucción del Capitalismo, pero lo que proponen es peor que la enfermedad que queremos curar: la tiranía del Estado en lugar de la tiranía del capital. "Sea que esta esclavitud surja de la tiranía del capital privado o del poder del Estado no cambia su efecto". (Pío XII - Navidad de 1942)

29. IGUALDAD Y EDUCACIÓN

La cultura es el trabajo de unas pocas figuras sobresalientes que se elevan sobre la masa general del pueblo. La civilización es la expresión tangible de la cultura, y presupone que las masas trabajan en conformidad con los patrones de cultura establecidos por esos pocos. La cultura, también, presupone que se tome conciencia de los valores espirituales y morales, y es la suma total del pensamiento independiente de los pocos. A partir de estos dos puntos, se deduce que la verdadera civilización no es posible cuando las masas no siguen a esos pocos sino que por ellos mismos fijan el patrón de las cosas que vendrán, o, de nuevo, cuando los pocos ya no son pensadores independientes y pierden el sentido de lo espiritual. Una civilización tecnológica no es una civilización digna de este nombre si un hombre puede ser un científico sin ser culto. Una civilización democrática no es una civilización digna de este nombre, si el patrón de las cosas que vendrán es fijado por las masas en vez de los pocos. En una sociedad donde la soberanía popular y la igualdad se consideran como esenciales, el liderazgo de los pocos es, o inexistente, o sólo se ejerce en un plano que es muy fácilmente asimilado por las masas, es decir, el plano material, el reino de la tecnología. En tales condiciones, la civilización no avanza, se deteriora; y nuestro concepto de la sociedad es falsa. "El verdadero progreso sólo se puede lograr con el retorno de numerosos e influyentes grupos humanos al recto orden social". (Pío XII - Navidad de 1942) Ya sea explícita o implícitamente, este extracto confirma plenamente, lo que se acaba de decir: 1) No estamos realmente avanzando ahora. 2) El liderazgo debe venir de arriba. 3) Nuestro concepto actual de la sociedad es falsa. San Pío X dijo la misma cosa, aunque en una forma diferente: "Nuestro predecesor (León XIII) anatematizo una "cierta democracia cuya perversidad llega al extremo de atribuir a la sociedad la soberanía del pueblo y procurar la supresión y nivelación de las clases". (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") Los sistemas educativos modernos ilustran este doble error: la soberanía popular y la igualdad. Las escuelas de hoy parecen estar dedicadas a la producción en masa de mediocres. Niños prometedores son puestos al nivel de la "mayoría" porque no estamos tan preocupados con la formación de élites como lo estamos para dar educación secundaria a todos los niños. Si el niño muestra su personalidad, es un "fenómeno", debe "ajustarse" a su medio ambiente. El niño debe, sobre todo convertirse en un "ciudadano útil", es decir, debe cumplir con el concepto de una sociedad igualitaria, y no superar a sus compañeros de escuela. ¡El espíritu de equipo por encima de todo! En el énfasis dado a los deportes, el "equipo" es de suma importancia, y los deportes que son estrictamente individuales no reciben el mismo estímulo. En el plan de estudios, temas culturales tales como el latín o la gramática son sustituidos cada vez más por ciencias. Que el ciudadano del mañana pueda ser incapaz de expresarse con claridad, no parece importar tanto mientras sea capaz de contribuir al progreso tecnológico. De esta manera, mejores autos serán construidos, aviones más rápidos se harán, mejores bombas serán diseñadas y, sin duda, esto traerá la felicidad a todo el mundo... Tal es la superstición de nuestra civilización tecnólatra, una superstición materialista, sin Dios, que se inculca en las mentes de nuestros niños con nuestro sistema educativo secular. La soberanía popular se ha infiltrado incluso en algunas de nuestras escuelas (especialmente en EE.UU.), donde a los niños se les pregunta qué temas quieren estudiar. La soberanía popular, la igualdad, la uniformidad, la cantidad, están todos relacionados entre sí cuando se examinan detenidamente. Alteran el verdadero propósito de la educación.

30. CORTANDO AL ESTADO DE LA IGLESIA

"No hay verdadera civilización sin civilización moral, y no hay verdadera civilización moral sin la verdadera religión: esta es una verdad, demostrada, éste es un hecho histórico." (San Pío X "Nuestro Mandato Apostólico") "Ahora bien, la base única de los preceptos morales es Dios. Si se niega la idea de Dios, esos preceptos necesariamente se desintegran por completo." (Juan XXIII "Mater et Magistra") Por consiguiente un Estado sin religión se convierte inevitablemente inmoral, tarde o temprano. El proceso de deterioro a veces puede ser lento, dependiendo de la fuerza de la fe cristiana que permanece en el pueblo, pero está obligado a terminar en la inmoralidad total (la moral, aquí, se entiende en su sentido más amplio, que abarca todas las virtudes cristianas, incluyendo la fe, y no sólo relativas a la moral sexual). Ya que la inmoralidad total implica el Ateísmo, un Estado separado de la Iglesia evoluciona infaliblemente hacia el Ateísmo. En otras palabras, tal Estado finalmente se vuelve Comunista, el credo comunista siendo el ateísmo llevado a su perfección y plenitud. Que nadie piense que esto es una cadena exagerada de razonamiento; es una evolución inevitable que ha sido señalada por muchos pensadores. Leyes humanas hechas por un Estado separado de la ley moral no tienen ninguna base firme. Ya no reflejan la voluntad de Dios, sino los caprichos del hombre. Las leyes de divorcio son un ejemplo de ello. La existencia misma de un sistema de educación secular es otro; de hecho, no sólo las escuelas privadas, que siguen siendo toleradas por el Estado moderno para ser subvencionadas, sino las escuelas del Estado, en efecto, no deberían existir en lo absoluto. ¿Es esta una perspectiva extrema? Puede parecerlo en el contexto del pensamiento moderno, pero, entonces, el pensamiento moderno está fuertemente influenciado por el poder de las tinieblas. La enseñanza es la transmisión de conocimientos, y en última instancia, el conocimiento viene de Dios. No hay verdadero conocimiento sin Dios. Entonces, ¿qué debemos pensar de las escuelas sin Dios? No perdamos de vista el importante hecho de que la educación secular es de fecha relativamente reciente. Antes de que la sociedad rechazara a Dios, todas las escuelas eran dirigidas por la Iglesia, lo mismo que los hospitales y los tribunales, (los términos "Hermana" y "Su Señoría" no tienen otro origen). Es, en efecto, la vocación natural de los siervos de Dios educar, hacer justicia, y el cuidado de los enfermos. Lejos de ser meramente una opinión personal, esta es la enseñanza de Cristo, expresada por medio de su Vicario en la tierra: " la educación pertenece por excelencia a la Iglesia ... es un derecho inalienable, así como el deber indispensable de la Iglesia, velar por la completa educación de sus hijos, en todas las instituciones, públicas o privadas, no sólo en lo que respecta a la enseñanza religiosa ofrecida, sino en lo que respecta a todas las otras ramas del saber." (Pío XI "Rappresentanti en Terra")

31. LA IGUAL COOPERACIÓN... UNA PELEA DISPAREJA


Los errores modernos están tan estrechamente correlacionados que poco se puede decir en este párrafo sin repetir lo que ya se ha dicho. La igual cooperación de todos los ciudadanos es, en realidad, un mito. Cada uno quiere ver que sus propios puntos de vista prevalezcan, y ya que los puntos de vista de los no creyentes son diametralmente opuestos a las opiniones de los Cristianos, esta cooperación sólo puede convertirse en una competencia reñida de ingenio. Los Cristianos, sin embargo, están en desventaja en cuanto a que tienen escrúpulos y no creen que el fin justifica los medios. De ello se desprende que los inescrupulosos finalmente prevalecerán. Esto fue señalado por Pío XI en "Quadragesimo Anno". La victoria de los inescrupulosos finalmente se refleja en todos los aspectos de la vida política, social y económica, algunos de los cuales ya he hablado. La igual cooperación de todos los ciudadanos es sólo otro ejemplo de cómo los errores de la Democracia Moderna pueden quebrantar el Cristianismo y degradan la fe.

32. LA DEMOCRACIA MODERNA, SU RESULTADO

Si la Democracia Moderna fuera en realidad el gran paso hacia adelante que se nos dice que es, si se tratara del cumplimiento de los sueños más queridos de la humanidad para un mundo mejor donde la justicia y la paz moran, los Papas la habrían considerado como tal, pero no lo han hecho. Por el contrario, deploran la ausencia de las mismas cosas que se suponía que la Democracia Moderna nos da, y notan con pesar el crecimiento de los mismos males que se suponía que la Democracia Moderna iba a eliminar. Por último, pero no menos importante, los Papas condenan una y otra vez los errores y males que son propios de la Democracia Moderna, y hacen hincapié en cómo, inevitablemente, las teorías democráticas conducen al Fascismo, Socialismo o Comunismo.

33. PÍO XII Y LOS DERECHOS DEL HOMBRE

En su mensaje de Navidad de 1942, Pío XII declaró que cada hombre tenía derecho a poseer su propia casa, y que el juntar en multitudes a los seres humanos debe ser evitado. ¿No es un hecho que grandes bloques de apartamentos de muchas plantas y enormes fábricas son una creación de la planificación económica moderna?. El Papa reiteró el derecho a la educación religiosa. ¿No es un hecho que todas las escuelas estaban en manos de la Iglesia en el pasado, y que la Democracia moderna no sólo defiende el secularismo, sino que también obliga a los padres Católicos a pagar impuestos para el mantenimiento del sistema de educación pagana? El Papa reafirmó el derecho al cumplimiento del propósito del matrimonio. ¿No es un hecho que las condiciones económicas modernas evitan que las familias tengan tantos hijos como les gustaría? ¿No es un hecho que la "ingeniería de la comunidad" se está moviendo hacia la introducción de leyes para la limitación obligatoria de los nacimientos? Y que del Divorcio y el Aborto, la Eutanasia y la Eugenesia? El concepto de comunidad en las sociedades democráticas amenaza las libertades más básicas de la persona humana. En consecuencia, Pío XII condenó todos los males a los que las ideas modernas han dado lugar. Pero, significativamente, en los Derechos del Hombre que lista, ¡no menciona en absoluto el derecho a votar!

34. PARLAMENTO, SUFRAGIO Y PODER


En otra alocución, el Papa recordó: "Únicamente la clara inteligencia de los fines señalados por Dios a todas las sociedades humanas, unida al sentimiento profundo de los deberes sublimes de la labor social, puede poner a los que se les ha confiado el poder, en condición de cumplir sus propias obligaciones de orden legislativo, judicial o ejecutivo, con aquella conciencia de la propia responsabilidad, con aquella generosidad, con aquella incorruptibilidad, sin las que un gobierno democrático difícilmente lograría obtener el respeto, la confianza y la adhesión de la parte mejor del pueblo." (Pío XII - Navidad de 1944) Puesto que cualquiera puede ser un candidato, y dado que los inescrupulosos están siempre en ventaja, un Parlamento difícilmente puede estar compuesto por hombres que poseen las cualidades nombradas por Pío XII. Esta razón, en efecto, fue dada en "Urbi Arcano Dei", y de nuevo en "Quadragesimo Anno". Además, gobernar a una nación es un arte difícil y un arte responsable. Mientras que un médico tiene que pasar muchos años de arduo estudio, seguido por un periodo de prácticas en un hospital. Para un político que es responsable, que no sólo tiene que tratar a unos pocos centenares de pacientes, sino a toda una nación, ¡no se requiere tener calificación alguna! Se trata de realidades como estas las que hacen que la democracia parlamentaria sea una farsa enorme y siniestra. Los seres humanos son personas; para que el poder sea humano, entonces, debe ser personal. Es verdad, el poder personal también puede ser inhumano, pues el hombre es una criatura caída y fácilmente se convierte infra-humano sin la gracia de Dios. Sin embargo, el poder no puede ser humano sin ser personal, así como una pera no puede ser tal si no viene de un peral. Pero en la democracia, mucho más que en una sociedad jerárquica, una legislación elaborada es necesaria. Esto es así porque un grupo de hombres no puede tomar decisiones a la misma vez, y su juicio considerado (o lo que ellos creen que es su juicio considerado), debe ser incorporado por adelantado en un código de leyes para cubrir todos los posibles casos que ellos son capaces de visualizar. Tales leyes no pueden ser renunciadas fácilmente, y su cumplimiento es confiado a una burocracia. En casos específicos, por lo tanto, la Burocracia simplemente, a ciegas e insensiblemente, aplica la letra de la ley. Es por eso que el poder impersonal, no puede ser sino inhumano. Un asunto muy diferente es cuando las regulaciones son asumidas por los Ministros o sus funcionarios: en cualquier momento pueden sentirse libres de renunciar a ellas para adaptarse a un caso específico. La democracia es inseparable del concepto de masa (o el concepto de comunidad). Las personas son menos importantes que la comunidad. Este error tan grave se agrava aún más en una sociedad Socialista. De ser insensible, la Burocracia dominante crece hasta ser brutal. La Democracia, el Socialismo (o el Fascismo) y el Comunismo, no son sino hitos a lo largo del mismo camino. Siendo impersonal, una Democracia no tiene memoria, ni imaginación, ni voluntad, ni coraje, ni vitalidad, ni responsabilidad; porque estos son atributos humanos, es decir, atributos personales. Esto explica por qué un gobierno democrático comete los mismos errores una y otra vez, (no puede aprender de la historia, al no tener memoria). Tal gobierno es incapaz de diseñar políticas imaginativas, con proyecciones al futuro. No tiene la voluntad de imponer las medidas necesarias. No tiene el coraje para hacer frente a realidades desagradables, sino que oculta lo que podría causar alarma. Evita responsabilidades como la de la peste; no puede tomar decisiones rápidas, bien definidas y positivas. Sus decisiones son las de una Comisión o un Comité, es decir, el resultado de un compromiso o la voluntad de la mayoría en el Comité. En el primer caso (es decir, de compromiso) la decisión se ha diluido, y ya no representa la visión exacta de nadie en particular, en el segundo caso (la mayoría), la sabiduría de la decisión se considera que es cuantitativo. Es trágico que las potencias occidentales sean incapaces de percibir la verdadera causa de su debilidad y decaigan antes de que realmente estemos sumidos en el desastre más terrible de toda la historia.

35. EL PODER PERSONAL Y EL FASCISMO

El poder personal no debe ser confundido con el Fascismo. Un dictador Fascista posee poder personal, pero el poder personal no es Fascismo. Todas las peras son frutas, pero no todas las frutas son peras; la generación actual, siendo el producto de nuestras escuelas modernas, piensa inmediatamente en el Fascismo cuando el poder personal es mencionado, confundiendo la fruta y la pera. El fascismo es, ante todo, la forma directa de la democracia moderna (véase el párrafo 10). Es una perversión del poder personal. Bien entendido, el poder personal no es incompatible con instituciones auténticamente democráticas. Dirigentes intermedios pueden ser elegidos por el pueblo, pero una vez elegidos, deben tener competencias efectivas y no ser dependientes de los caprichos de la opinión pública, o de las intrigas del parlamento y los partidos. Las instituciones occidentales, sin embargo, a veces parecen ser buenas en algunos aspectos. Esto no es debido a que son democráticas, sino porque todavía son influenciadas por 19 siglos de tradición Cristiana, y de este modo fallan a ser totalmente democráticas.

36. CARDENALES Y POLÍTICOS

Si el derecho al voto es considerado como indispensable en el gobierno civil, ¿por qué no en el gobierno de la Iglesia también? Que los Cardenales sean elegidos por los fieles es la conclusión lógica de la creencia en el sufragio popular. Entonces, los cardenales elegirían al Papa, y tendríamos una Iglesia realmente "democrática". ¿Quizás será argumentado que la política y la religión son dos cosas diferentes? Son, en efecto, pero en cuanto a la trabajabilidad, utilidad y eficiencia que al cuerpo gobernante le interesa, lo que es verdad para uno es también verdad para el otro. En la organización monárquico-jerárquica de la Iglesia, según lo establecido por el Mismo Cristo, los cardenales son nombrados por el Papa, no elegidos por el pueblo, y esta es una de las razones por las que la Iglesia ha resistido la prueba de 19 siglos. Si los cardenales fueran elegidos por el pueblo, la anarquía pronto prevalecería, y la Iglesia se desintegraría al igual que los modernos Estados democráticos. Los asuntos del Estado no son menos difíciles de realizar que los asuntos de la Iglesia. Se da por hecho que los Cardenales debieran recibir un entrenamiento largo y minucioso, desde el seminario a través del Sacerdocio, y en adelante. Pero los políticos no están obligados a tener habilitación alguna! Con suficiente oratoria para influenciar a la multitud, y el dinero suficiente para hacer una campaña electoral, cualquiera puede convertirse en un miembro del Parlamento. Tal es la trágica farsa de la Democracia moderna.


PARTE IV: EL PLAN MAESTRO DEL DIABLO

37. EL DESARROLLO DE LOS ERRORES MODERNOS

Por aproximadamente diecisiete siglos los hombres reconocieron que la autoridad viene sólo de Dios, y los gobernantes temporales buscaron la aprobación y la bendición de sus obispos que, por derecho divino, mandaban en sus diócesis como sucesores de los Apóstoles. Luego vinieron los Filosofastros. Como siempre, el Poder de las Tinieblas utilizó el orgullo para lograr sus objetivos - el orgullo de la razón humana. Como siempre llamó a la Luz, Oscuridad y a la Oscuridad, Luz. Es por eso que los tiempos Medievales ahora se conocen como la "Edad Oscura"; (de hecho, la Edad Oscura fue pre-medieval), y por qué el Filosofismo se conoce como la "Ilustración". Como siempre, el diablo actuó con sutileza: no trajo de inmediato al Comunismo, trajo a la Democracia Moderna en primer lugar, sabiendo que una llevaría a la otra. Los señuelos inherentes a la primera llevarían más fácil a la destrucción del hombre por la segunda. El diablo actuó con astucia. Es tan perspicaz que incluso los cristianos fueron engañados. Para hacer de ello un trabajo minucioso inculcó en la mente moderna el mito de la inevitabilidad histórica. "Debemos marchar con los tiempos", nos dicen, ¡como si los tiempos no fueran lo que nosotros hacemos de ellos!

38. UN PROCESO SUTIL Y GRADUAL

El estado actual del mundo no se debe a la casualidad; es el resultado de la lucha eterna entre el bien y el mal. El diablo sabe que su lucha contra Dios tiene que ser gradual si se quiere tener alguna posibilidad de éxito. Por lo tanto, comenzó su lucha en el siglo 16, dividiendo al Cristianismo. Cuando la primera batalla había sido ganada, el diablo se trasladó del campo religioso al campo filosófico, y concibió al Racionalismo, lo que pone a la razón humana antes de la Revelación. Ya que los cristianos estaban divididos, no hubo un solo frente para defender la primacía de la Revelación Divina. La interpretación de la Revelación Divina estando dividida contra sí misma, no pudo resistir la demanda de la llamada primacía de la razón humana. La razón humana parecía más fiable, por lo que la nueva filosofía se instaló por sí misma. Naturalmente lo que siguió es que el hombre empezó a pensar en un paraíso terrenal. Por lo tanto el Racionalismo engendró al Mesianismo Humano (es decir, el Humanismo). Era entonces lógico que el hombre no quiera ser impedido por normas de conducta moral. Él tenía que ser libre de todas las restricciones, y su sola razón iba a decirle cómo actuar y comportarse. Así nació la doctrina del Liberalismo. Casi inmediatamente, esta doctrina se extendió a todos los ámbitos de actividad humana, especialmente la economía, política y ciencia. De ser filosófica, se convirtió en práctica; una forma de vida, el origen filosófico del cual la mayoría de la gente no sospecha hoy en día.

39. UNA TRINIDAD IMPÍA

Después de esto, el Mesianismo Humano fue combinado con el Liberalismo para establecer el Capitalismo, un sistema económico basado en la codicia y la usura, que allana el camino para el Comunismo. El Racionalismo y el Liberalismo se combinaron para dar a luz al principio de la soberanía popular - (siendo libre y razonable, todo ser humano podía tomar todas las decisiones). El Racionalismo y el Mesianismo Humano se combinaron para dar a luz al cientificismo (o el culto a la Tecnología), la adoración de la obra del hombre, es decir, la tecnolatría mediante la cual esperamos la salvación por medio de una mejor y más alta producción, un error que fue observado por Pío XII en su mensaje de Navidad de 1952. Se habla de "Progreso" en términos de industrialización, sin darse cuenta de "las innegables ventajas de una economía basada principalmente en la agricultura".

40. DIABÓLICAMENTE LÓGICO

En consecuencia, la trinidad impía, es decir: El Racionalismo, el Mesianismo Humano, y el Liberalismo, sentaron las bases para todos los males que están destruyendo la sociedad moderna. Observemos cuán gradual ha sido el proceso: a) La diferencia en puntos de vista religiosos (afectando al alma). b) La alteración en el pensamiento filosófico (afectando al intelecto). c) La organización y el propósito del mundo físico (afectando a la voluntad). Observemos cuán lógico ha sido el desarrollo: a) La Reforma (dividiendo al Cristianismo para debilitar a la Revelación Divina). b) El Racionalismo (dudando que el hombre puede confiar en la Revelación Divina). c) El Mesianismo Humano (afirmando que el hombre puede confiar en sí mismo). d) El Liberalismo (confiando en el hombre totalmente). e) El Capitalismo (el Mesianismo Humano más el Liberalismo). f) La Democracia (el Racionalismo más el Liberalismo). g) La Tecnocracia (y la Tecnolatría) - (el nacionalismo más el Mesianismo Humano). Este desarrollo es muy gradual y lógico como para dejar cualquier duda de si existe una Inteligencia detrás de él. Esta Inteligencia es la del Poder de las Tinieblas. Un número de Santos ha dicho que, en los Últimos Días, el mal se hará por hombres de buena voluntad. No hay duda que muchos católicos creen de buena fe que estamos viviendo en una era de progreso, y que la Democracia Moderna Es un Avance. Las ventajas superficiales que presenta oculta de muchos su naturaleza intrínseca, los errores en que se basa, y los males que la acompañan. El engaño del Diablo ha funcionado.

41. DANDO AL HOMBRE LO QUE ES DE DIOS


No me preocupan, aquí, las causas y los organismos humanos que hicieron posible este desarrollo. Son sólo causas y agencias secundarias. La Reforma, que he tomado como la causa inicial, fue en sí misma una consecuencia, - en gran parte de la corrupción dentro de la Iglesia. Pero esa corrupción es también la consecuencia de algo más, porque, en la historia, todo lo que sigue es consecuencia de otra cosa. Podríamos ir muy lejos en el pasado sin encontrar la causa inicial. Así que he tomado la Reforma como el principio, lo que representa un movimiento coherente, una forma organizada de esfuerzo humano, en contraposición a una mera situación. No hay duda que, sin tratar de echarle la culpa a nadie en particular, pues las responsabilidades se distribuyeron uniformemente en cada lado, la Reforma rompió la unidad de la Revelación Divina. Ya que la Biblia fue interpretada entonces de diferentes maneras, los Racionalistas tuvieron su oportunidad para demostrar que la Revelación no era fiable. Como se explicó anteriormente, esto sólo podía conducir al eventual rechazo de Dios. Después de haber rechazado la autoridad de Dios, la sociedad sólo podría ser sometida, tarde o temprano, a la autoridad del hombre. Era inevitable que todos los poderes se cristalizaran en un hombre, o un pequeño grupo de hombres. Y así llegó la Democracia, el Fascismo, el Socialismo y el Comunismo. En todos estos regímenes o sistemas, la autoridad se supone que proviene del hombre, no de Dios, mientras que en el pasado se ha reconocido públicamente que el rey estaba ejercitando la autoridad de Dios, y las ceremonias de coronación tenían un carácter sacramental que era mucho más que un mero símbolo. Era la consagración del rey a su pueblo por las manos del Obispo. Esa es la manera que debería ser, esto es, que el poder temporal se confiera a un hombre por el poder espiritual de la Iglesia. (Nótese, sin embargo, que el llamado "derecho divino" de los Reyes es un punto de vista extremo contrario a la doctrina Católica. Sólo los obispos tienen un derecho divino.)

42. EL ÁRBOL GENEALÓGICO DE LOS ERRORES MODERNOS


Hemos visto el desarrollo de los errores modernos. El hecho de que la evolución de la sociedad moderna en los últimos cuatro siglos es raramente vista como la obra del Diablo, de hecho debe ser muy agradable para él. Si estamos ciegos a su astucia, ¿cómo podemos evitar ser meros peones en el tablero de su lucha en contra de Dios? Aquí, ahora, para la conveniencia del lector, está lo que podría llamarse "El árbol genealógico de los errores modernos". No tiene la pretensión de ser exhaustivo, sino más bien de mostrar en un vistazo el desarrollo racional de los principales errores modernos, con una breve definición de sus principios y sus implicaciones. En primer lugar lea la tabla de izquierda a derecha, y luego hacia abajo. Con un poco de atención, al lector no le puede faltar ver el desarrollo de un error al siguiente. 




Filosofía
(Ya sea como una doctrina formulada, o como un punto de vista general.)
Economía
Política
Educación
Racionalismo
(El hombre es razonable. La razón humana cuenta más que la Revelación Divina.)
No tiene consecuencias inmediatas en Economía, Política y Educación, porque el Racionalismo, que es puramente una opción filosófica, aún no ha dado sus frutos.


Positivismo
(La razón humana por sí sola es de fiar, y especialmente lo que se puede experimentar a través de los cinco sentidos.)
Liberalismo
(Siendo razonable, el hombre debe estar libre de toda autoridad y moderación.)
Liberalismo
(En la Política, el Liberalismo da a luz a la Democracia.)
Liberalismo
(En la Educación, el Liberalismo da a luz a las escuelas seculares.)
Mesianismo Humano
(Se suele llamar "Humanismo", pero este término se ha evitado en este folleto, ya que tiene al menos tres significados diferentes. El Mesianismo Humano sostiene que el hombre solo, a través del ejercicio de su razón, puede trabajar por su felicidad en la tierra.
Capitalismo
(La felicidad puede lograrse mejor a través del uso libre del dinero y del crédito.)
Democracia Liberal
(Siendo libre y razonable, todo hombre debe tener una participación en el gobierno. Él tendrá esa participación a través del Sufragio Universal.)
Educación Secular
(Siendo libres y razonables, los hijos de los hombres deben ser capaces de "pensar por sí mismos" y no estar sometidos a una "tendencia" religiosa. En consecuencia, las escuelas son secularizadas, es decir, tomadas de la Iglesia. Sin embargo, la enseñanza religiosa no es todavía totalmente suprimida.)
Mesianismo Humano
evoluciona más y más hacia el Materialismo (felicidad terrenal a través del uso de la razón aplicada a los bienes materiales).
Plutocracia Burocrática
(Sin embargo, el libre uso del dinero permite a algunos grupos a llegar a ser muy poderosos. Pronto controlan al mismo Estado; y el Estado se convierte en burocrático, o mejor dicho, los plutócratas usan la burocracia en nombre del Estado con el fin de organizar mejor el uso del dinero y del crédito para su propio beneficio. En definitiva, el Capitalismo se hace cargo del Estado.)
Democracia        Pluto-Burocrática
(Siendo ahora controlada por las Finanzas (Plutócratas) y por comités de partidos; la gente ya no es realmente libre, aunque las apariencias engañosas de la libertad se conservan (Pío XII). Es el sometimiento económico de las masas - (Pío XII de nuevo). Esto es el llamado "Mundo Libre" de hoy, y la primera forma de Sociocracia.) (Sociocracia es esa forma de organización humana en la que la sociedad cuenta más que los individuos.)
Educación Secularista
(como la anterior, pero la enseñanza se vuelve cada vez más positivista en su perspectiva. Esta distinción entre la educación Secular y Secularista se justifica por hechos, y ha sido reconocida por los obispos de Estados Unidos en su Declaración Anual de 1961:. "Al principio", leemos, "no había ninguna intención de excluir a la religión, pero la creciente medida del secularismo ha producido la escuela sin la religión.")
Materialismo
(La felicidad del hombre en la tierra se encuentra sólo en los bienes materiales.)
Socialismo
(Consciente de la naturaleza perversa del Capitalismo, que erróneamente identifican con la propiedad privada, los Socialistas quieren romper los grupos de poder de los plutócratas, y organizar el uso del dinero en nombre de las personas. Por lo tanto, el Materialismo, que fue puesto en nuestro estilo de vida por el Capitalismo privado, es configurado ahora como una doctrina por el Socialismo. Recibe el sello oficial del Estado. En definitiva, el Estado asume el control del Capitalismo.)
El Socialismo o la Socialdemocracia
(Puesto que la economía siempre gobierna la Política en los tiempos modernos, una economía guiada necesariamente implica a una Democracia guiada entre líneas socialistas. El Socialismo, en efecto, prácticamente admite que el hombre no es altruista, por lo tanto, no es razonable realmente. El Socialismo es en realidad una reacción, pero una reacción tan radical que nos lleva de vuelta a tiempos pre-Cristianos. Que el hombre pueda ser redimido por la gracia no se le ocurre a los Socialistas. Por lo tanto, el hombre debe ser controlado por la ley y los reglamentos. Esta es la segunda forma de Sociocracia.)
Educación Laicista
(Damos un paso adelante ahora. Una filosofía materialista es introducida en los libros de texto. La educación Secular tomó las escuelas de las manos de la Iglesia; la educación Secularista trató de suprimir la enseñanza religiosa; la educación Laicista presenta ahora ideas anticristianas. Un desarrollo gradual y lógico. Nótese, sin embargo, que la creencia en un Ser Supremo de algún tipo todavía no es rechazada de manera explícita, pero el nombre de Dios se evita en general.)
Tecnolatría
(El Culto a la Tecnología,-que ya era evidente en la Plutocracia Burocrática y el Socialismo, se plantea ahora en el altar del Estado. Sostiene que solo el bienestar material cuenta, y que puede lograrse mejor a través de una completa devoción a la Ciencia. El hombre viene a adorar la obra de sus manos.)
Comunismo
(Puesto que la economía se basa en el Trabajo, así como en el Dinero, el Trabajo en sí debe ahora ser organizado. En otras palabras, el Socialismo organiza el dinero. el Comunismo además organiza el trabajo. El hombre se convierte en un esclavo completo en orden de manufacturar - en teoría, un mayor número de bienes.)
Comunismo
(En virtud de la misma ley que sujeta la Democracia Liberal a los grupos de dinero, y la Socialdemocracia al control Estatal, la economía del Comunismo priva al hombre de todos los derechos civiles con el fin de mejorar su uso como unidad de trabajo. El sufragio se ha convertido en una farsa. Esta es la última forma de Sociocracia.)
Educación Atea
(El Materialismo Dialéctico es ahora el tema principal del plan de estudios; él impregna todos los demás temas. La religión "científicamente" expuesta como una superstición, y la existencia de Dios negada explícitamente. el culto de la Ciencia (Tecnolatría) está tomando el lugar de Dios. Así, la obra del Diablo está casi terminada.)



42a. OBSERVACIONES SOBRE EL ÁRBOL GENEALÓGICO

Hay muchos puntos en el "Árbol Genealógico de los Errores Modernos" que serían deseables poner. El espacio no me permite hacerlo, pero no es difícil ver las relaciones entre los diversos errores enumerados anteriormente si uno le da al tablero un poco de atención. Es bastante claro, por ejemplo, que el mito de "libre y razonable", es decir, el Liberalismo y el Racionalismo, es la única causa que subraya a todos los errores. En consecuencia, todos estos errores son inseparables, especialmente el Materialismo, el Capitalismo, la Democracia y la educación Secular. Ya que estos errores son inseparables, es inútil luchar contra unos mientras se apoya a los otros como dignos ideales. También es claro que la Educación Secular no es sino el primer paso hacia la Educación Atea - ("Quien no está Conmigo está contra Mí".) A los niños de una escuela de la Iglesia no se les podía enseñar que Dios no existe, por lo que el paso obvio fue tomar las escuelas del control de la Iglesia, y esto se hizo en el siglo 19. Las escuelas seculares, sin embargo, no prohibieron la enseñanza religiosa inmediatamente. Ese era el siguiente paso, es decir, la Educación Secularista. Pero incluso la educación Secularista no se atrevía a atacar las ideas Cristianas abiertamente. Un tiempo tenía que pasar para que la próxima generación, sin haber tenido instrucción religiosa alguna, pueda aceptar más fácilmente las ideas anti-cristianas extendidas por la Educación Laicista. Por supuesto, no había ninguna duda en ese momento para afirmar que Dios no existía. Se estimó que era preferible omitir el nombre de Dios siempre que sea posible, y, cuando no era posible, sustituir su lugar con el término "Ser Supremo". El uso de "Ser Supremo" se convirtió, con en el tiempo, tan vago y remoto como para perder todo su significado. Y así se abrió la puerta para la Educación Atea. Esto es exactamente lo que ha sucedido o está sucediendo, con algunas pequeñas variaciones, en casi todos los países. El esquema general no era tanto concebido por el hombre como era llevado a cabo por él. El esquema total es el plan maestro del Diablo para engañar y usar a los hombres a fin de lograr traer mejor la destrucción de la humanidad.


PARTE V: LA ACTITUD DE LOS CATÓLICOS EN UN MUNDO DE ERRORES

43. LO QUE PIENSAN LOS PAPAS

Siendo divinamente inspirados, los Papas no pueden rechazar los conceptos socio-políticos que construyeron a la Cristiandad y la hicieron irradiar al mundo en diecisiete siglos de historia. Sin embargo, si un Papa fuera a hacerlo, habría que inferir que es hereje. Han habido Papas herejes en la larga historia de la Iglesia, y es prácticamente seguro que la historia se repita en los últimos días (es decir, la Gran Apostasía predicha por Nuestro Señor). Pero, dotados con la preciosa herencia de la tradición cristiana, los Papas como conjunto han condenado los errores modernos. Estos errores han llevado al mundo entero al borde del desastre. Plenamente conscientes del peligro, los Papas han hecho clara su posición. "No hay necesidad de romper con el pasado ... Es suficiente restaurar las instituciones que fueron rotas por la Revolución y adaptarlas al nuevo entorno resultado del desarrollo material de la sociedad ... los verdaderos amigos de las personas no son innovadores sino tradicionalistas ... " (San Pío X, "Nuestro Mandato Apostólico") "Por lo tanto, dicen, ¡la Democracia es para anunciar el reino de la completa justicia! ¿No es eso un insulto a otras formas de gobierno, reduciéndolas de este modo al nivel de improvisaciones ineficientes? ... ¡Ahora bien! ... a su juventud católica se le dice ... que los grandes Obispos y los grandes Reyes ... no pudieron dar a sus pueblos ni verdadera justicia ni verdadera felicidad! ... El espíritu de la la revolución está obviamente ahí, y Nosotros sólo podemos concluir que las doctrinas sociales del Sillon son falsas; su espíritu es peligroso, y su enseñanza mortal". (San Pío X, ibíd.)

44. LO QUE PIENSA EL HOMBRE MODERNO

Lamentablemente, un gran número de católicos, a pesar de que puedan ser buenos en sus vidas personales, han perdido de vista estas enseñanzas y han permitido a los perniciosos errores de la llamada Ilustración envenenar su pensamiento. Al condenar la Revolución, San Pío X no condenó ninguna revolución en particular, él condenó la revolución de las ideas que tuvo lugar en el siglo 18, y que normalmente es llamada "Ilustración" en el mundo de habla española. Si se hubiera querido referir a la Revolución Francesa de 1789, el resultado sería el mismo, porque la Revolución Francesa se basó en esas ideas. El hombre moderno está completamente convencido de que esas ideas son correctas. Pero, ¿puede un católico ignorar las enseñanzas de los Papas?

45. CÓMO HABLAN LOS PAPAS


Los papas usualmente no andan con rodeos; son muy francos, y su lenguaje a menudo es contundente. Incluso Pío XII, cuyo verdadero pensamiento a veces había que buscarse entre las líneas (como en su alocución de Navidad de 1944), fue distintivamente contundente a veces (como en "Summi Pontificatus" y "Humani Generis"). Cuando los Papas denuncian un error, no lo hacen en términos ambiguos, como Pío XI: "Es absolutamente falso decir..." (Párr. 18), y Gregorio XVI: "Es una locura creer..." (Párr. 20 arriba).

46. CÓMO HABLA EL HOMBRE MODERNO

El hombre moderno, sin embargo, conforme a la moda aceptada, imperante entre la gente con buenos modales y educada, no diría: "Es absolutamente falso". Ahora, ¡eso sólo no se hace! El hombre moderno utilizaría una cautelosa paráfrasis. No afirmaría, ni siquiera sugeriría de inmediato, sino sólo arriesgaría una opinión competente: "Me atrevería a decir que esto no es siempre del todo correcto" Este artificio de estilo, por supuesto, suena radicalmente diferente de: "Es absolutamente falso". En realidad, contiene cuatro subestimaciones a) Es correcto hasta cierto punto (pero no del todo) b) A veces es correcto (aunque no siempre) c) No es, sólo podría ser (una reserva que tiene a ambos "siempre" y "todo".) d) No es una afirmación; sólo una solicitud "arriesgada". Cuando una opinión está tan diluida, pierde la mayor parte de su significado. Deja lugar a dudas en las mentes de los oyentes. Ya nada es seguro, y todo se convierte en una cuestión de "opinión personal". El lenguaje moderno oculta su falta de coraje moral detrás de una pantalla de moderación. Refleja el sentido equivocado de tolerancia y el deseo de apaciguar lo que es típico de nuestros tiempos. ¡Qué contraste con el lenguaje utilizado por los Papas! Cristo, también, siempre utiliza un lenguaje directo, que solía conmover a muchos de Sus oyentes e incluso a sus propios discípulos. ¿Debería un católico, entonces, tener miedo de ser franco?

47. LO QUE LOS PAPAS NOS DICEN QUE HAGAMOS

Los Papas no nos dejan ninguna duda acerca de lo que debemos hacer, en cuanto a cómo debemos hablar. San Pío X condenó a "esos católicos que dejan su religión en la puerta" ("Nuestro Mandato Apostólico"), y están siempre dispuestos a comprometerse con el espíritu de esta época, para colaborar con las víctimas de los errores modernos, y de observar un prudente silencio. Él dijo: "No más de este silencio que sería un crimen." (ibíd.) Hablando de aquellos católicos que tienen miedo de hacer valer la verdad, Pío XII fue tan lejos como para usar las palabras: "Vacilantes, débiles, impotentes" ("Summi Pontificatis"). Más tarde, habló de "los partidarios exaltados del apaciguamiento", y advirtió: "Muchos del clero más joven en particular, se extraviarán por este mal ejemplo." ("Humani generis"). ¿Hay algún lugar para la complacencia? Si no ignoramos la enseñanza de los Papas sobre los errores políticos modernos - y no podemos - ¿no tenemos el deber de hablar?

48. ADVERTENCIAS DADAS POR LOS PAPAS


Las siguientes advertencias deberían ser un motivo de profunda preocupación para todo Católico. Ellas dejan en claro un hecho que es muy a menudo pasado por alto, esto es, que muchos católicos han sido contaminados por los errores de nuestra época. "Los partidarios del error no sólo tienen que ser buscados entre los enemigos declarados de la Iglesia; ellos andan escondidos, algo que debe ser muy lamentado y temido, en su propio seno y corazón, y son más maliciosos, mientras menos visibles sean. Hablamos, venerables hermanos, de un gran número de laicos católicos y, lo que es aún más deplorable, hasta de sacerdotes... totalmente impregnados con doctrinas venenosas enseñadas por los enemigos de la Iglesia". (San Pío X "Pascendi Dominici Gregis") Tres años más tarde, San Pío X dio otra advertencia, especialmente destinada para el sacerdocio: "Que el Sacerdocio no se deje engañar por los milagros de una falsa democracia hacia el laberinto de las ideas modernas, que no se presten de la retórica de los peores enemigos de la Iglesia, las frases altisonantes, llenas de promesas, que son tan exageradas como irrealizables". ("Nuestro Mandato Apostólico") En 1942, Pío XII se vio obligado a emitir una advertencia similar: "No pocos de los que se llaman cristianos, tienen alguna participación en la responsabilidad colectiva de las aberraciones, los desastres y el bajo estado moral de la sociedad moderna." (Navidad de 1942) Advertencias como estas deberían inducirnos a cada uno de nosotros a examinar de cerca sus creencias sociales y políticas.

49. LA PRUDENCIA HUMANA Y LA SABIDURÍA DIVINA

Si los enemigos de la Iglesia "se atreven a gritar" todos estos errores, - a utilizar las mismas palabras de Pío IX (párr. 14), ¿por qué no deberíamos también denunciar tales errores? ¿Por qué debemos adoptar la "estrategia del silencio"?, o peor aún, ¿por qué, como San Pío X dijo, debemos intentar reconciliar al error con la verdad? La prudencia humana en este sentido es una locura a los ojos de Dios. El silencio es el principio del compromiso, y el compromiso, además de ser el camino más seguro hacia el desastre, es una traición a nuestros principios. Principios, no conveniencias, deben dirigir nuestras acciones. Los principios se basan en verdades permanentes y objetivas, mientras que la conveniencia se basa en la apreciación subjetiva de las circunstancias del momento. Las políticas basadas en la conveniencia son inestables y siempre cambiantes.

50. LA LOCURA DEL EVANGELIO

Nada podría haber parecido menos oportuno que la predicación del Evangelio en la época de Cristo. Humanamente hablando, era una locura. Lejos de ser un éxito en el sentido mundano de la palabra, la predicación terminó en la ignominiosa muerte de su promotor, y la persecución de sus discípulos. Los Fariseos fueron triunfantes y las legiones Romanas habían restablecido "la ley y el orden." Pero, como suele ser el caso, esta locura humana fue sabiduría divina. El Cristianismo iba a cambiar al mundo entero, incluyendo al Líder Supremo de las Legiones Romanas tres siglos más tarde. Una cruz apareció en el cielo con las palabras "In hoc signo vinces", y este milagro llevó a Constantino a su victoria, y eventualmente a su conversión. Por lo tanto, también hoy, puede parecer una locura oponerse abiertamente al orden establecido. Puede parecer más oportuno observar un silencio prudente, o incluso buscar un compromiso, pero ¡qué falta de fe denota! ¡Qué miserable traición a los principios Cristianos! ¿Acaso no sabemos que Dios puede obrar otro milagro si es necesario? ¿Pero no le debemos dar una muestra de nuestra voluntad de luchar? En efecto, si hemos de creerle a San Juan Bosco, a San Luis María Grignon de Montfort, y a muchos otros santos, la ocurrencia de un milagro como tal, en un futuro no muy lejano, es una posibilidad distintiva. Pero, haya milagro o no, nuestra voluntad de luchar debería ser la misma. No puede haber ningún compromiso con un orden social enraizado en el Liberalismo. Lo que se llama "moderación" es una excusa fácil para no hacer nada. A menudo es una máscara para ocultar la falta de coraje y determinación. Para estar seguros, los compromisos pueden conseguir algunas ventajas inmediatas. Sin embargo, ¡una ventaja inmediata y limitada es un premio muy pobre cuando el precio son los intereses de largo alcance y esenciales del Cristianismo!. Que tal política equivale a una traición fue declarado por San Pío X: "La Iglesia nunca ha traicionado el bienestar de las personas a través de alianzas peligrosas." ("Nuestro Mandato Apostólico")

51. LA DIVISIÓN DE LOS CATÓLICOS

No hay duda de que el mundo Católico está dividido en un número de puntos (esto fue escrito en 1962 - es mucho peor hoy en día) - incluyendo el de si esta división debería ser expuesta a la luz pública o, por el contrario, ignorada en silencio en un espíritu de apaciguamiento. ¿Quién tiene razón y quién está equivocado? La respuesta se encuentra en las Encíclicas, de las cuales numerosas citas se han dado en este folleto. Uno no puede estar equivocado si sigue a los Papas, y se adhiere a la filosofía anterior a la Ilustración. ¿Causaría una ruptura? De hecho, podría, pero "A veces es necesario cortar un miembro para salvar al resto del cuerpo" (San Pío X, ibíd.). No debemos olvidar nunca los pronunciamientos Papales. Si no los olvidamos, no podemos eludir lo que dicen. Y si no evadimos los temas en cuestión, no podemos dejar de tener en cuenta que el orden político y social de hoy en día se basa en ideas que son básicamente falsas y peligrosas. Pero si no hacemos ninguna de estas cosas estamos irremediablemente ciegos o carecemos de integridad intelectual.

52. ALGUNAS OBJECIONES Y SUS RESPUESTAS

Muchas citas en este libro provienen de la Carta sobre el Sillon que San Pío X envió a los obispos franceses en 1910. Puede que se argumente que ahora es anticuado. Es cierto que el movimiento Sillonista ahora está muerto, como tal, pero sus errores están muy vivos, y se han extendido por todas partes. Los extractos dados en este folleto deberían hacer este hecho muy claro. Es claro que el tema de esta carta es tan aplicable hoy como lo era entonces. Citas como las que este folleto contiene a veces se dice que carecen de sentido porque se leen fuera de contexto. Esta es una objeción superficial, y la acusación implícita que lleva no parece ser justa. Naturalmente, es imposible citar una carta o encíclica en su totalidad en un artículo como éste. Muchas de las citas son tan claras, sin embargo, que ninguna duda razonablemente puede surgir en cuanto a su significado real. Otras, tal vez, aumentarían en valor al ser leídas en contexto. Pero ya que indico todas las fuentes de referencia, cualquiera puede comprobarlo por sí mismo. A veces se dice que las cuestiones políticas y sociales no son asunto para el católico promedio y que, para él, es suficiente llevar una buena vida, ir a Misa, y en general seguir los mandamientos de Dios y los preceptos de la Iglesia. Si tal fuera el caso, los Papas no hubieran escrito tantas Encíclicas sociales. No habrían insistido, una y otra vez; numerosas citas podrían darse diciendo - que todos los católicos deben tener un interés en cuestiones políticas y sociales. En las Encíclicas, nos encontramos con un estudio lúcido de las enfermedades y males modernos, con sus causas, consecuencias y remedios. Muchos aspectos de la vida moderna que confunden al hombre promedio, se vuelven claras como el cristal a la luz de las Encíclicas y otros documentos. En un tiempo en que tantos libros voluminosos son escritos, solo sumándose a la confusión general de nuestra época, uno no puede dejar de pensar que las Encíclicas, en su relativa brevedad, son realmente inspiradas por el Espíritu Santo. Es trágico que se vean con tanta indiferencia. ¿Podría ser que las condiciones modernas, la complejidad de la vida y el desarrollo de las relaciones sociales hagan las Encíclicas del pasado obsoletas? Podría ser así si el propósito de las Encíclicas fuera resaltar métodos y sistemas. Sin embargo, las Encíclicas no resaltan métodos, se ocupan de los principios básicos, y sobre todo cuando estos principios se ven amenazados por nuevos métodos o sistemas que la sociedad puede optar por poner en práctica. Los principios básicos no cambian, siguen siendo siempre válidos. Es necesario, por supuesto, adaptar métodos, sistemas e instituciones al nuevo entorno como resultado del desarrollo material de la sociedad - que es precisamente lo que San Pío X dijo (véase el párr. 43) - pero esta adaptación necesaria no debe violar los principios. La idea de que lo que era verdad ayer no es necesariamente verdad hoy en día es ahora muy común. A menudo se expresa en frases como: "Usted está fuera de época, ya no lo hacemos; tuvo su momento; estás pasado de moda..." Sin embargo, esta forma moderna de expresar la desaprobación evita toda referencia a la verdad o a la falsedad de una proposición. Es una manera fácil de resolver una pregunta sin una discusión racional. Esta idea, en efecto, es básicamente una idea Marxista. En la doctrina de Karl Marx, la verdad no "es", sino "se hace". Cuando examinamos a fondo las ideas modernas que han ganado el reconocimiento en prácticamente todas las regiones, solemos descubrir su origen en el Marxismo. Las ideas Marxistas han penetrado el pensamiento moderno sin que siquiera seamos conscientes de ello. Sería un error creer, sin embargo que estas ideas se encuentran sólo en el Comunismo. Y la idea de que la verdad sufre cambios es una de ellas. Si las Encíclicas no son obsoletas, por lo menos, algunos pueden argumentar, que no son vinculantes para nuestra fe. Después de todo, los Papas son infalibles sólo cuando hablan "ex cathedra". Acerca de lo demás, se limitan a expresar sus opiniones personales, y no estamos obligados a suscribirnos a estas opiniones. Este argumento es aún más peligroso, ya que hábilmente presenta dos afirmaciones que son sustancialmente ciertas: Las Encíclicas no son artículos de fe, y los Papas no son infalibles en el sentido estricto cuando las escriben. Pero Pío XII eliminó esta falacia en "Humani generis", cuando dijo: "Ni puede afirmarse que las enseñanzas de las encíclicas no exijan de por sí nuestro asentimiento, pretextando que los Romanos Pontífices no ejercen en ellas la suprema majestad de su Magisterio. Pues son enseñanzas del Magisterio ordinario, para las cuales valen también aquellas palabras: El que a vosotros escucha, a mí me escucha. (Lucas X. 16); y la mayor parte de las veces, lo que se propone e inculca en las Encíclicas pertenece ya —por otras razones— al patrimonio de la doctrina Católica." (Pío XII "Humani generis") Creo que he refutado los argumentos más probables de ser presentados. La enseñanza política y social de las Encíclicas simplemente no se puede descartar.



CONCLUSIÓN: VOLVER A LA CORDURA


53. ACCIÓN, MOVIMIENTO, VELOCIDAD

Si, cambiando con el tiempo, la Verdad ya no es un ser, es decir, algo-que-es, sino que es considerada como un devenir, es decir, algo-que-viene-a-ser (véase párr. 52), a esto le sigue que la moción se vuelve más importante que la esencia. Este concepto básicamente Marxista es en efecto propio de nuestros tiempos. Lo encontramos en la importancia dada a palabras tales como: evolución, desarrollo, acción, progreso, etc. El hombre, que es en realidad una esencia está supuestamente todavía evolucionando; el desarrollo de las industrias incluso si son inútiles - se supone que trae felicidad a la gente, y así sucesivamente. La acción es el dios de la sociedad moderna, así como el Poder es su diosa. La acción ya no tiene que justificarse con referencia a su finalidad; se auto-justifica. "Él es un hombre de acción" constituye una alabanza a la que nadie levantaría preguntas. La acción y la moción vienen a ser el principio y el final de todo. La velocidad toma el lugar de la reflexión y la discusión inteligente. La acumulación de fragmentos de información, artículos, y "situaciones" desconectadas y a menudo sin sentido es una característica del periodismo moderno, la radio y películas. Cuando una novela o una obra está "llena de vida, es dinámica y atiborrada de movimiento", es probable que sea un éxito inmediato. El amor por la velocidad y el movimiento también se refleja en las estadísticas de los accidentes automovilísticos. Sería una exageración, sin embargo, decir que todas estas cosas son el resultado de ideas Marxistas, pero ciertamente están estrechamente relacionadas. Al igual que las mismas ideas Marxistas, pueden remontarse a los escritos de los filosofastros del siglo 18, los promotores de la gran Revolución de Ideas llamada Ilustración. (Para la mayor parte de este párrafo estoy en deuda con una obra de Jean Ousset: "El Marxismo-Leninismo", sin duda la mejor que he leído sobre el tema.)

54. EL FATALISMO DE LA HISTORIA


Una esencia es absoluta, pero una moción es contingente. Sin embargo, cuando la moción tiene prioridad sobre la esencia, como es el caso en los tiempos modernos, sus respectivos atributos son automáticamente invertidos (la nuestra es sin duda la Era de la Inversión: en la política {donde la autoridad se supone que viene de abajo}; en la economía {ver los párrafos 22 y 28}; en la moral {que es una característica de todas las civilizaciones en declive}, y en muchos otros ámbitos), y la moción se convierte absoluta mientras que la esencia es meramente contingente. Encontramos una aplicación práctica de este falso concepto en la creencia, común en los EE.UU., de que el hombre puede ser mejorado; o en Rusia, de que el hombre puede ser moldeado para adaptarse a las tendencias de la historia, que es en realidad una moción. Por lo tanto, el hombre ya no hace la historia, la historia se supone que hace al hombre. La historia es considerada como un poder creativo, y el hombre como la materia prima. La historia se supone que sigue un curso inevitable, y el hombre no es más que llevado con ella. El hombre debe "marchar con los tiempos", no debe estar "fuera de moda", y así sucesivamente. Pero no nos equivoquemos al respecto: el flujo de la historia no es irreversible. No es irrealista, por lo tanto, abogar por un retorno a las instituciones del pasado. Lo que sí es irrealista es pensar que el orden político y social de hoy en día está aquí para quedarse. Ya está descomponiéndose rápidamente desde dentro, y es inevitable que sea arrastrado por algún desastre a menos que lo cambiemos nosotros mismos antes de que sea demasiado tarde.

55. LA HISTORIA DE UN ERROR

¿El mundo libre introducirá estos cambios? No parece probable. Suponiendo que la Democracia sea suficientemente fuerte como para destruir al Comunismo (y puede serlo), o que, siendo lo suficientemente fuerte, tuviera la voluntad de asumir los riesgos necesarios (lo cual es dudoso), nuevas diferencias todavía se plantearían después, del mismo modo que surgieron después de la destrucción del Hitlerismo. Esto es así porque nuestra filosofía humanista lleva en sí las semillas de la disensión y división. Siempre y cuando no reconozcamos nuestros errores no vamos a estar preparados para introducir modificaciones. Mientras que el fatalismo de la historia es un mito, la libre elección de un error tiene consecuencias históricas fatales. Cuando las cosas lleguen a un momento decisivo, es probable que las democracias occidentales se quiebren por dentro. Frente a las agonizantes alternativas y los desgarradores dilemas, los líderes vacilantes cederán el paso a más determinados y más extremistas políticos de Izquierda. Entonces, la transición del Socialismo al Comunismo será un proceso rápido. Una guerra mundial es poco probable, pero eso no significa que no habrá lucha en absoluto. Tampoco significa que la lucha acabará, sino sólo que nuestro orden social, como tal, colapsará. La verdadera lucha será en serio y será muy diferente de lo que se espera en general. Nuestra Señora de Fátima nos dijo en palabras sencillas que a menos que "los hombres hagan penitencia, Rusia esparciría sus errores alrededor del mundo, promoviendo guerras y revoluciones, y naciones enteras serían aniquiladas." En 1917, esta profecía sonaba increíble; Rusia no contaba para nada en la escena mundial, y la revolución Bolchevique todavía no había triunfado. Hoy, sin embargo, Rusia es una potencia mundial. Nuestra Señora entonces le dio a Lucía un mensaje secreto que todavía, hasta ahora, no ha sido comunicado al mundo. Finalmente, dijo: "Al final, Rusia se convertirá y habrá paz." No hay duda, pues, que, con la ayuda de Dios, la tiranía Comunista será derrocada. He mencionado Fátima ya que es bien conocida alrededor del mundo Católico, y porque ha sido reconocido públicamente por muchos altos prelados, especialmente en Europa, y también por el difunto Papa Pío XII. Pero el mensaje de Fátima no es el único de su tipo. Mientras que la derrota del Comunismo es una certeza absoluta, hay toda razón para creer que no va a venir antes de una victoria temporal. Una vez más, si el Comunismo fuera un castigo divino, (hemos visto que lo es, y el mensaje de Fátima, entre otros, da una confirmación implícita), es lógico esperar que deba conseguir una victoria temporal.

56. EL MUNDO DEL MAÑANA

Después de esto, uno puede esperar que el mundo va a recuperar su cordura. Incluso ahora, no pocas personas piensan que estamos pasando por las etapas finales de una época causante de crisis, de donde surgirá un orden político completamente diferente de lo que se ha conocido hasta ahora, un orden político que combine las instituciones del pasado con la conciencia social del presente. Este nuevo orden será de carácter profundamente religioso aceptando la supremacía espiritual de la Iglesia en todos los campos, y restaurando la autoridad en su lugar correcto. El Reinado de Cristo, por fin, será reconocido, pues la idea de monarquía ya no le repugnará al hombre. Su Santa Madre será reconocida como la Reina de todos los Pueblos, la Co-Redentora, Mediadora y Abogada. En ese día, que no está lejos, todo el mundo disfrutará de paz y prosperidad, porque la Voluntad de nuestro Padre se hará en la tierra como en el Cielo.

--- FIN ---

Yves Dupont nació en la década de 1920 y falleció en los finales de 1970 (no sé la fecha exacta, pero murió de cáncer a finales de sus 50s). Originalmente un ciudadano Francés, luchó en la Resistencia Francesa y luego emigró a Australia después de la Segunda Guerra Mundial. Él es mejor conocido por su libro Catholic Prophecy - The Coming Chastisement (Profecía Católica - El Castigo venidero), que aún está disponible en TAN Books & Publishers, P.O. Box 424, Rockford, Illinois 61105, la cual es una lectura obligatoria para cualquier estudiante de profecía Católica. El trabajo actual fue publicado por Tenet Books, P.O. Box 180, Hawthorn, Vic. 3122, Australia. Sin embargo, creo que la firma era la suya, así que probablemente ya no existe. El copyright original se presume que ha caducado, ya que el trabajo no se ha visto desde su publicación original. Este compromiso se realiza en memoria del Sr. Dupont, quien fue verdaderamente un gran Católico. Se recomienda al lector que lo recuerde en sus oraciones.


Cf. = (Procede del latín confer, abreviado cf. o cfr.) Confróntese o compárese.
           
ibíd. = (Procede del latín Ibídem, abreviado ib. o ibíd.) En el mismo lugar. Se usa en las citas o notas de un texto para referir a una fuente que ya fue declarada en la cita previa.

Santo Tomas de Aquino, "Summa Teológica"
"Este Concilio Vaticano declara que la persona humana tiene derecho a la libertad religiosa. Esta libertad consiste en que todos los hombres han de estar inmunes de coacción, tanto por parte de individuos como de grupos sociales y de cualquier potestad humana, y esto de tal manera que, en materia religiosa, ni se obligue a nadie a obrar contra su conciencia, ni se le impida que actúe conforme a ella en privado y en público, sólo o asociado con otros, dentro de los límites debidos. Declara, además, que el derecho a la libertad religiosa está realmente fundado en la dignidad misma de la persona humana, tal como se la conoce por la palabra revelada de Dios y por la misma razón natural. "


Pío VI, "Caritas Quae"
Inglés http://www.papalencyclicals.net/Pius06/p6charit.htm
Italiano http://www.documentacatholicaomnia.eu/04z/z_1834-06-25__SS_Gregorius_XVI__Singulari_Nos__IT.doc.html


Gregorio XVI, Referencias en "Syllabus" (Pío IX) de "Nunquam fore"
"la amplia facultad concedida a todos de manifestar abiertamente y en público cualesquiera opiniones y pensamientos, (conduce) a corromper más fácilmente las costumbres y los ánimos, y a propagar la peste del indiferentismo."


Pío IX, "Quanta cura"
Inglés http://www.papalencyclicals.net/Pius09/p9maxima.htm


Pío IX, "Acerbissimum"
http://books.google.co.nz/books?id=dgwtAAAAYAAJ&pg=PA73&lpg=PA73&dq=#v=onepage&q&f=false (Latín)


Pío IX, Referencias en "Syllabus" de "Ad Apostolicae", "Acerbissimum" y "Maxima Quidem"
http://www.clerus.org/bibliaclerusonline/es/il4.htm#h2


Pío IX, "Ad Apostolicae"       
http://www.clerus.org/bibliaclerusonline/es/ion.htm


San Pío X, "Pascendi Dominici Gregis"
Italiano http://www.vatican.va/holy_father/pius_xi/encyclicals/documents/hf_p-xi_enc_19291231_rappresentanti-in-terra_it.html
Inglés http://www.papalencyclicals.net/Pius11/P11RAPPR.HTM


Pío XII, "Mensaje de Navidad de 1944"
http://www.vatican.va/holy_father/pius_xii/speeches/1944/documents/hf_p-xii_spe_19441224_natale_sp.html


Pío XII, "Mensaje del 6 de abril 1951" en AAS 43 (Acta Apostolicae Sedis) (latín) p. 278



Traducido de http://www.catholicculture.org/culture/library/view.cfm?recnum=5827